informe anual integrado de la hacienda vasca euskal ...

En el período 1998-2001, sin cambios normativos significativos para las empresas
vascas, se presentaron las liquidaciones correspondientes a ejercicios con buenos resultados
y en 2002 se aprobaron un conjunto de medidas con incidencia en la recaudación y que
resumidamente suponen: la exención por reinversión del 100% de las ganancias
patrimoniales, la ampliación de los límites y supuestos en la deducción por actividades de
investigación y desarrollo o innovación tecnológica, el aumento al 15% de la deducción por
actividades de conservación y mejora del medio ambiente o de ahorro energético para las
PYMEs, una nueva deducción del 10% de las contribuciones empresariales a planes de
pensiones, mutualidades de previsión social y EPSVs, una nueva definición de PYME,
elevándose, respectivamente, a 6 y 24 millones de euros la facturación máxima establecida y
la ampliación hasta 100.000 euros del tramo de la base al tipo del 30% para las PYMEs.
3. IVA
El IVA entró en vigor el 1 de enero de 1986, como requisito previo a la entrada en la
Comunidad Económica Europea. En su corta historia se ha convertido en una figura tributaria
básica del sistema tributario del País Vasco, tanto por su potencial recaudatorio como por su
incidencia sobre la actividad económica.
Su evolución, en términos recaudatorios, está influenciada por los cambios normativos,
así como por la situación económica, a cuyas fluctuaciones se muestra especialmente
sensible. Los tipos impositivos del Impuesto han variado a lo largo de estos años,
permaneciendo invariables desde 1995:
Con la aparición de las “adquisiciones intracomunitarias”, a partir de 1993, se produjo
un importante transvase de recaudación desde el apartado del ajuste al de gestión propia.
Las Diputaciones Forales pasaron en 1993 a recaudar directamente el IVA proveniente de las
importaciones procedentes de países miembros de la Unión Europea, que suponían en torno
al 60% de las importaciones totales. El mayor costo de gestión se compensó financieramente
con el cobro mensual de las autoliquidaciones, frente al ajuste trimestral proveniente de la
Administración del Estado.
La recaudación por el IVA gestionado por las Diputaciones Forales ha crecido de modo
más que aceptable durante el período 1999-2004, con un incremento anual medio del 9,1%,
si bien no siempre se ha producido entre partidas homogéneas.
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En 1999 se consolida la buena evolución de la recaudación del Impuesto, como
consecuencia de la situación de bonanza económica y del empuje del consumo. Al cierre del
ejercicio la recaudación se incrementó en un 11,3%.
En el ejercicio 2000 crecieron con fuerza las devoluciones, empujadas por el alto nivel
de las exportaciones y de las inversiones empresariales, duplicando la tasa registrada en la
recaudación íntegra. Así, la recaudación líquida se incrementó en sólo un 4,5%, por debajo