12.07.2015 Views

Leer-la-tienda-de-muñecos-y-otros-textos

Leer-la-tienda-de-muñecos-y-otros-textos

Leer-la-tienda-de-muñecos-y-otros-textos

SHOW MORE
SHOW LESS
  • No tags were found...

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

sustraídos <strong>de</strong>l cuarto <strong>de</strong> un viajero; formal <strong>de</strong>nuncia ha sido puesta, y seestá averiguando... averiguando... Pancho el Guaireño y C<strong>la</strong>ra Elisa cambianentre sí graves miradas, mientras observan en silencio, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> lejos,junto con <strong>otros</strong> circunstantes y curiosos, a cierto <strong>de</strong>tective que hab<strong>la</strong>,aparte, en voz muy baja, en el recibo, con el señor Fe<strong>de</strong>rico, o don Ernesto,<strong>de</strong>spués <strong>de</strong> haberse entrevistado con <strong>la</strong> Señorita Encarnación, alláa<strong>de</strong>ntro, en el máximo secreto <strong>de</strong> su <strong>de</strong>partamento inaccesible, y conChepín como único testigo. El primero que es interrogado en estos casoses Panchito, y si es <strong>de</strong> llevar gente presa a <strong>la</strong> Policía, también es Panchitoel primero que va preso. Lo robado se encuentra o no; el asunto se esc<strong>la</strong>receo se complica más aún; pero es seguro que Panchito regresa, a pocoandar, sano y salvo, como a buen puerto, a La Tuna, en don<strong>de</strong> ha quedadoesperándole <strong>la</strong> escoba. (En todo ese tiempo no se barrerá más en LaTuna, así como tampoco habrá quien suba o quien baje hasta el portón,<strong>de</strong> día o <strong>de</strong> madrugada, <strong>la</strong>s maletas, los baúles o <strong>la</strong>s petacas <strong>de</strong> los pasajeros<strong>de</strong> llegada o <strong>de</strong> salida).Pero, a veces, también –como compensación, quizás, bien merecida–,había inesperados y casi fulminantes regocijos en La Tuna, y hastauna vez murió allí un Senador. Entonces viene <strong>la</strong> murga (hablo <strong>de</strong> losgrados, santos, nombramientos, etc.); entra sin ruido, entendiéndose losmúsicos por señas, entre ellos, y disimu<strong>la</strong>ndo bien sus instrumentos parano hacerse aún notar; van situándose, en grupo, a mitad <strong>de</strong> <strong>la</strong> escalera,en el <strong>de</strong>scanso; y <strong>de</strong>s<strong>de</strong> allí, <strong>de</strong> golpe, rompiendo con todas estas misteriosasprecauciones, todos a un tiempo, con estruendo ¡atacan una rumbao un merengue o un joropo! A poco ar<strong>de</strong> ya toda La Tuna, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> elportal, en don<strong>de</strong> se aglomeran los curiosos, hasta el último rincón <strong>de</strong> <strong>la</strong>azotea, en don<strong>de</strong> tiemb<strong>la</strong>n los venados y se escandalizan <strong>la</strong>s gallinas. ¡Seencien<strong>de</strong>, bril<strong>la</strong> y rumorea toda una noche, nuestra Tuna con sus gentesinf<strong>la</strong>mables, propensas casi todas a <strong>la</strong> turbulencia y el bullicio!Hay un teléfono en La Tuna, un viejo teléfono asfixiado en una redinextricable <strong>de</strong> auxiliares insta<strong>la</strong>dos por todos <strong>la</strong>dos, a través <strong>de</strong> una maraña<strong>de</strong> polvorientos hilos, entre<strong>la</strong>zados con los <strong>de</strong> <strong>la</strong> luz, los <strong>de</strong> los timbresy hasta quizás los <strong>de</strong> colgar <strong>la</strong> ropa. Cuando se hab<strong>la</strong> por este teléfono,se tiene <strong>la</strong> impresión muy c<strong>la</strong>ra (y es esto lo único que suele sentir-LA TIENDA DE MUÑECOS Y OTROS TEXTOS78

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!