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Training Institutes 2010
RESOURCES
Concepto y filosofía de los sistemas de cuidado
DEFINICIÓN
Un sistema de cuidado consiste en: Un espectro de servicios y apoyos efectivos, basados en la comunidad, para el niño y
el joven que corren riesgo de padecer enfermedades mentales u otros desafíos y para sus familias, que está organizado en
una red coordinada, que forma alianzas importantes con las familias y los jóvenes, prestando atención a sus necesidades
culturales y lingüísticas, a fin de ayudarlos a desenvolverse mejor en el hogar, en la escuela, en la comunidad y en sus vidas.
VALORES BÁSICOS
Los sistemas de cuidado:
1. Son sistemas dirigidos por la familia y con la guía de los jóvenes, que tienen en cuenta las fortalezas y las
necesidades del niño y la familia para determinar los tipos y las combinaciones de servicios y apoyos que se prestan.
2. Están basados en la comunidad y los servicios así como la administración del sistema se apoyan en una
infraestructura adaptable de estructuras, procesos y relaciones a nivel comunitario.
3. Son sistemas que poseen competencia cultural y lingüística, y sus organismos, programas y servicios reflejan las
diferencias culturales, raciales, étnicas y lingüísticas de las poblaciones a las que se prestan servicios para facilitar
el acceso y la utilización de servicios y apoyos adecuados.
PRINCIPIOS ORIENTADORES
Los sistemas de cuidado están diseñados para:
1. Garantizar la disponibilidad y el acceso a una amplia gama de servicios y apoyos, para el niño y su familia, que
sean flexibles, efectivos, fundados en la experiencia, basados en la comunidad y que atiendan sus necesidades
físicas, emocionales, sociales y educativas, incluyendo servicios tradicionales y no tradicionales, así como apoyos
informales y naturales.
2. Ofrecer servicios individualizados de acuerdo con el potencial y las necesidades exclusivas de cada niño y familia,
guiados por un proceso de planificación de servicios integrales basados en fortalezas y en un plan de servicios
individualizados realizado a través de una verdadera colaboración con el niño y la familia.
3. Prestar servicios y apoyos que sean clínicamente apropiados dentro del medio menos restrictivo, más normal
posible y que sean adecuados desde el punto de vista clínico.
4. Garantizar que exista total colaboración entre las familias, los demás proveedores de cuidados y el joven, en
todos los aspectos de la planificación y la prestación de sus propios servicios y en las políticas y procedimientos
que rigen el cuidado del niño y del joven en sus comunidades, estados, territorios, tribus y nación.
5. Garantizar la colaboración entre los sistemas con conexiones entre los organismos que prestan servicios para el
niño y los programas existentes en todos los sistemas administrativos y de financiamiento y los mecanismos de
gestión a nivel del sistema, coordinación y gestión integrada del cuidado.
6. Prestar servicios de gestión del cuidado y mecanismos similares a fin de garantizar que se presten una multiplicidad
de servicios de manera coordinada y terapéutica y que el niño y la familia puedan desplazarse dentro del sistema de
servicios, de acuerdo a sus necesidades cambiantes.
7. Prestar servicios y apoyos en salud mental, adecuados al nivel de desarrollo, que promuevan resultados sociales y
emocionales óptimos para el niño y su familia dentro del hogar y de la comunidad.
8. Prestar servicios y apoyos, adecuados al nivel de desarrollo del individuo, para facilitar la transición de los jóvenes
a la vida adulta y al sistema de servicios para adultos según se necesiten.
9. Incorporar o conectarse con servicios de promoción, prevención, identificación temprana e intervención a fin de
mejorar los resultados a largo plazo, incluyendo mecanismos para identificar problemas con anticipación y
actividades de promoción y prevención dirigidas a todos los niños y adolescentes.
10. Incorporar mecanismos permanentes de responsabilidad a fin dar seguimiento, controlar y administrar el logro de
los objetivos del sistema de cuidado, la fidelidad a la filosofía del sistema de cuidado, así como la calidad, la
eficacia y los resultados en los ámbitos del sistema, de la práctica y de la familia y el niño.
11. Proteger los derechos del niño, del joven y de las familias y promover iniciativas de apoyo efectivas.
12. Prestar servicios y apoyos sin tomar en cuenta raza, religión, procedencia, género, expresión de género, orientación
sexual, discapacidad física, estatus socioeconómico, geografía, idioma, estatus inmigratorio u otras características;
los servicios deben ser sensibles y responder a estas diferencias.
Stroul, B., Blau, G., & Friedman, R. (2010). Updating the system of care concept and philosophy. Washington, DC: Georgetown
University Center for Child and Human Development, National Technical Assistance Center for Children’s Mental Health.
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