Agronegocios en Chile - faceaucentral

Los Re c u R s o s Ag R í c o L A s y L o s Ag R o n e g o c i o s en ch i L e
facilidad de trabajarlos (estructura). Los suelos son una combinación de arena,
limo y arcilla. Los suelos que contienen una mezcla equilibrada de los tres tipos de
partículas físicas, se denominan suelos francos. Una característica muy importante
de los suelos agrícolas es su capacidad para retener humedad. Los suelos arenosos
retienen poca agua, no más del 10% de su volumen total. Los suelos francos pueden
retener hasta un 20% de su volumen. Finalmente, los suelos arcillosos retienen un
30% de su volumen.
Se llama “Capacidad de Campo” al contenido máximo de humedad que un suelo
puede retener contra la gravedad, una vez que el agua ha saturado el perfil (una
profundidad dada) y ha drenado libremente. Se denomina Porcentaje de Marchitez
Permanente (PMP) el contenido de humedad mínimo en un suelo, nivel al cual las
plantas se marchitan, se secan y mueren por falta de agua. Obviamente, el productor
no dejará que su cultivo llegue a ese extremo y regará antes. El tiempo que transcurre
entre un riego y otro se llama “frecuencia de riego”.
La segunda pregunta es ¿cuándo regar? La respuesta tiene que ver con la frecuencia
de riego. Los suelos arenosos se riegan cada 3 – 5 días, porque retienen poca humedad.
Los suelos francos admiten riegos más espaciados, cada 7 – 10 días. Por último,
los suelos arcillosos pueden pasar hasta un mes sin que sea necesario regar. Pero la
frecuencia de riego también depende del estado de desarrollo de un cultivo, del clima
o condición meteorológica imperante en un mes dado, de la presencia de vientos (el
aire se seca más rápido y la planta transpira a una mayor tasa).
La tercera pregunta ¿cuánto regar? Tiene que ver con el tiempo de aplicación del
riego, el número de horas que debe estar corriendo el agua en un surco o inundando
el terreno. Pero también se relaciona con el volumen de agua que debe aplicarse a
una superficie de suelo, porque si conocemos el caudal de riego (volumen por unidad
de tiempo) y éste no varía, bastará con fijar un tiempo de aplicación para aportar
el volumen requerido. Por ejemplo, un equipo de aspersión aplica un caudal de 50
m3/h, funciona durante 10 horas al día. Al término del riego, se habrá aplicado un
volumen de 500 m3, suficiente para cubrir las necesidades de agua de una hectárea,
después de una semana sin riego.
Los sistemas de riego tecnificado pueden aplicar el agua con frecuencia diaria,
es decir, están diseñados para reponer el agua perdida el día anterior. Los sistemas
de riego por superficie aplican grandes cantidades de agua con una frecuencia que
va de 1 a 3 semanas.
Los métodos de riego responden a la pregunta ¿cómo regar? Es decir, la forma
en que el agua de riego llega al terreno y se aplica sobre el cultivo.
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