11.05.2013 Views

Plan Binacional para la Recuperación de la Tortuga Lora ...

Plan Binacional para la Recuperación de la Tortuga Lora ...

Plan Binacional para la Recuperación de la Tortuga Lora ...

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

oca o el esófago y más <strong>de</strong> 50% presentaron chapopote endurecido en sus mandíbu<strong>la</strong>s<br />

(Witherington, 1994).<br />

Contaminación por ruido <strong>de</strong> baja frecuencia<br />

En algunas partes <strong>de</strong>l mundo, los niveles <strong>de</strong> ruido subacuático se han incrementado<br />

drásticamente en <strong>la</strong>s décadas recientes, <strong>de</strong>bido a fuentes antropogénicas, tales como activida<strong>de</strong>s<br />

comerciales, industriales y recreativas. En particu<strong>la</strong>r, un componente predominante <strong>de</strong> los<br />

sonidos provenientes <strong>de</strong> estas fuentes, es <strong>de</strong> baja frecuencia, los cuales viajan más lejos y<br />

persisten por más tiempo en el medio marino. Actualmente, este tipo <strong>de</strong> ruido pue<strong>de</strong> ser un<br />

asunto preocupante, en re<strong>la</strong>ción con <strong>la</strong>s tortugas marinas, ya que su audición está confinada a<br />

bajas frecuencias (Ridgway et al., 1969; Bartol et al., 1999). Por otro <strong>la</strong>do, <strong>la</strong>s tortugas marinas<br />

se reúnen en áreas costeras en don<strong>de</strong> <strong>la</strong> actividad humana y, por lo tanto <strong>la</strong>s perturbaciones<br />

antropogénicas y ruido submarino, son intensas. Es posible que los incrementos continuos <strong>de</strong>l<br />

ruido antropogénico puedan tener, en <strong>la</strong> tortuga marina, efectos adversos en su biología,<br />

comportamiento a corto p<strong>la</strong>zo y salud <strong>de</strong> <strong>la</strong>rgo p<strong>la</strong>zo.<br />

Muchos estudios han ligado el ruido antropogénico a efectos adversos, en <strong>la</strong> ecología natural <strong>de</strong><br />

los organismos marinos. Entre los vertebrados superiores, se ha <strong>de</strong>mostrado que <strong>la</strong>s ballenas<br />

boreales presentan reacciones <strong>de</strong> evasión importantes hacia el sonido proveniente <strong>de</strong> <strong>la</strong>s<br />

activida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> perforación petrolera (Malme et al., 1983), y hacia ruidos <strong>de</strong> exploración sísmica<br />

(Richardson et al., 1986). A<strong>de</strong>más, en <strong>la</strong>s ballenas, existe una disminución en sus tasas <strong>de</strong><br />

emisión <strong>de</strong> sonidos (Lesage et al., 1999), o <strong>de</strong>tienen sus vocalizaciones (Bowles et al., 1994), en<br />

respuesta a los botes que se acercan a el<strong>la</strong>s, lo cual indica que <strong>la</strong> respuesta es altamente<br />

<strong>de</strong>pendiente en el contexto <strong>de</strong> exposición acústica. Entre peces, varias especies han mostrado que<br />

reaccionan a estímulos sonoros, al incrementar <strong>la</strong> velocidad <strong>de</strong> nado (Olsen et al., 1983), al nadar<br />

hacia abajo (Suzuki et al., 1980) y al evitar <strong>la</strong>s fuentes <strong>de</strong> sonido (B<strong>la</strong>xter y Hoss, 1981; Schwarz<br />

y Greer, 1984; Vabo et al., 2002). El sonido también pue<strong>de</strong> tener efectos físicos, provocando<br />

daños medibles, en célu<strong>la</strong>s sensoriales <strong>de</strong> los oídos <strong>de</strong> los peces (Hastings et al., 1996). Los<br />

invertebrados, como el camarón café, han mostrado que son afectados <strong>de</strong> forma adversa por el<br />

ruido subacuático (Lagardère, 1982). Cuando es expuesto a altos niveles <strong>de</strong> ruido, el camarón<br />

café presenta un incremento en <strong>la</strong> agresividad y tasas <strong>de</strong> mortalidad más elevadas, así como<br />

disminución en <strong>la</strong> ingesta <strong>de</strong> alimento, mostrando a<strong>de</strong>más, reducciones significativas en sus tasas<br />

<strong>de</strong> crecimiento y reproducción (Lagardère, 1982). Se pue<strong>de</strong>n esperar diferentes respuestas, aún<br />

<strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> un mismo taxón, <strong>de</strong>pendiendo <strong>de</strong>l sexo, edad, temporada y muchos otros factores,<br />

a<strong>de</strong>más <strong>de</strong>l nivel <strong>de</strong> exposición y duración.<br />

En tortugas marinas, mucho <strong>de</strong> <strong>la</strong> investigación acústica se ha enfocado en el estudio <strong>de</strong> <strong>la</strong><br />

anatomía <strong>de</strong>l oído y <strong>de</strong> sus capacida<strong>de</strong>s sensoriales auditivas. Estos estudios <strong>de</strong>muestran<br />

c<strong>la</strong>ramente, que <strong>la</strong>s tortugas marinas son capaces <strong>de</strong> <strong>de</strong>tectar y respon<strong>de</strong>r a sonidos y que su<br />

audición está limitada a bajas frecuencias (menos <strong>de</strong> 1000Hz), con una máxima sensibilidad<br />

entre los 200 y 700 Hz, y un pico alre<strong>de</strong>dor <strong>de</strong> los 400 Hz (Ridgway et al., 1969; Bartol et al.,<br />

1999). Estudios re<strong>la</strong>cionados <strong>de</strong>mostraron que, <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> <strong>la</strong> presentación <strong>de</strong>l estímulo acústico,<br />

<strong>la</strong>s tortugas marinas respondieron con movimientos corporales abruptos, tales como parpa<strong>de</strong>o,<br />

retracción <strong>de</strong> <strong>la</strong> cabeza y movimiento <strong>de</strong> <strong>la</strong>s aletas, todos los cuales fueron interpretados como<br />

respuestas <strong>de</strong> a<strong>la</strong>rma (Lenhardt et al., 1983; Lenhardt, 1994; Lenhardt et al., 1996). A<strong>de</strong>más, <strong>la</strong>s<br />

respuestas <strong>de</strong> más alto nivel, tales como cambios en los patrones <strong>de</strong> nado y orientación fueron<br />

observadas cuando <strong>la</strong>s tortugas, confinadas en un canal, fueron sometidas a pulsos <strong>de</strong> pisto<strong>la</strong>s <strong>de</strong><br />

aire con niveles altos <strong>de</strong> presión, con frecuencias que osci<strong>la</strong>ron entre 25 y 1000 Hz (O’Hara y<br />

Wilcox, 1990).<br />

I-77

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!