La extinción de las especies biológicas. Construcción de un

El que les habla es consciente de que aún permanecen mucho puntos en la penumbra.
El futuro puede abrir muchas puertas a la reflexión interdisciplinar libre, de modo de
que los científicos y las instituciones científicas (como esta digna Academia) sean capaces
de trabajar en equipo y con ilusión y con sentido de servicio a la comunidad humana.
Termino este discurso con un texto de aquel buscador infatigable de un puente cognitivo
entre la ciencia, la filosofía y la religión, Pierre Teilhard de Chardin: “Lo que más me
apasiona en la vida es poder colaborar en una obra y una realidad más duradera que yo
mismo”. (Escrito en el frente de Verdún, en 1916).
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