La lealtad de los delincuentes - tonisoler
La lealtad de los delincuentes - tonisoler
La lealtad de los delincuentes - tonisoler
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
5. Depresión<br />
Lunes, uno más y <strong>de</strong> nuevo con resaca; no mucha, eso sí. Me acababa<br />
<strong>de</strong> levantar, eran las diez <strong>de</strong> la mañana y, al asomarme a la habitación <strong>de</strong><br />
invitados, <strong>de</strong>scubrí que Fran ya se había marchado. Había <strong>de</strong>jado una nota<br />
encima <strong>de</strong> la cama: “Gracias, tío. Me piro a casa <strong>de</strong> mi madre. Tengo que<br />
pensar. Au.”<br />
El pá<strong>de</strong>l se había convertido en <strong>los</strong> últimos años en el <strong>de</strong>porte nacional<br />
<strong>de</strong> <strong>los</strong> ex directivos en paro y yo me había unido a esa moda, fiel a las nuevas<br />
costumbres impuestas por la crisis.<br />
Álex vivía en Valterna, en una urbanización <strong>de</strong> esas que tienen <strong>de</strong> todo:<br />
gimnasio, piscina cubierta, sauna y pistas <strong>de</strong> pá<strong>de</strong>l, y todos <strong>los</strong> lunes<br />
jugábamos en su casa. Él y yo como pareja, y como en su urbanización había<br />
trescientas viviendas y abundaban <strong>los</strong> <strong>de</strong>sempleados, nunca nos faltaban<br />
contrincantes.<br />
Álex estaba casado con Alicia, una mujer a la que yo admiraba. Había<br />
<strong>de</strong>dicado al estudio toda su juventud, mientras Álex se pasaba las noches<br />
<strong>de</strong> juerga con <strong>los</strong> amigotes. Ahora era registradora <strong>de</strong> la Propiedad. Yo la<br />
apreciaba muchísimo y a su hijo también. Fran y Alicia se conocieron en el<br />
instituto a <strong>los</strong> quince años y <strong>de</strong>s<strong>de</strong> entonces ella había pertenecido, <strong>de</strong> una<br />
forma u otra, a la pandilla. Se casaron tan sólo con veinte años y hacía cuatro<br />
que habían sido padres <strong>de</strong>l chiquillo más bueno, guapo y encantador <strong>de</strong>l<br />
Universo. Así quería yo a esa maravil<strong>los</strong>a familia.<br />
Hacía tan sólo dos meses que habían <strong>de</strong>spedido a Álex <strong>de</strong>l trabajo y ahora se<br />
ocupaba él <strong>de</strong> la casa y <strong>de</strong>l niño. Antes tenían una asistenta, ahora el asistente<br />
31