27.04.2013 Views

1340232811825

1340232811825

1340232811825

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

Una amplia sonrisa se extendió por su cara, haciendo que le aparecieran<br />

hoyuelos en las mejillas. —Ven conmigo a casa —dijo, envolviéndome en sus<br />

brazos.<br />

Mis cejas se alzaron. —¿Dijiste todo eso para tenerme en tu cama? Debí<br />

haberte dado una gran impresión.<br />

—Lo único que estoy pensando ahora mismo es en tenerte en mis brazos<br />

toda la noche.<br />

—Vamos. —sonreí.<br />

A pesar del exceso de velocidad y la infracción de señales, el paseo hasta<br />

el apartamento parecía no tener fin. Cuando finalmente llegamos, Travis me<br />

cargó por las escaleras. Me reí contra sus labios mientras intentaba abrir la<br />

puerta. Cuando me puso de pie y cerró la puerta detrás de nosotros, dejó<br />

escapar un largo suspiro, aliviado.<br />

—No ha parecido como un hogar desde que te fuiste. —dijo, besando mis<br />

labios. Toto correteó por el pasillo y meneó su pequeña cola, pateando mis<br />

piernas. Le susurré mientras lo levantaba del suelo.<br />

La cama de Shepley chilló, y luego sus pisadas resonaron en el piso. Su<br />

puerta se abrió mientras entrecerraba los ojos por la luz. — ¡A la mierda no,<br />

Trav, no estás haciendo esta mierda! Estás enamorado de Ab... —sus ojos se<br />

enfocaron y reconoció su error, —...by. Hola, Abby.<br />

—Hey, Shep. —sonreí, dejando a Toto en el suelo.<br />

Travis pasó conmigo junto a su, todavía sorprendido, primo, y pateó la<br />

puerta cerrándola detrás de nosotros, tirando de mí en sus brazos y<br />

besándome sin pensarlo dos veces, como si lo hubiéramos hecho un millón de<br />

veces. Le quité la camisa sobre su cabeza, y él deslizó mi chaqueta por mis<br />

hombros. Dejé de besarle el tiempo suficiente para quitarme el jersey y<br />

camiseta, y luego me estrellé contra él. Nos desnudamos el uno al otro, y en<br />

cuestión de segundos, me colocó en su colchón. Alcé mi mano por encima de<br />

mi cabeza para abrir su cajón y sumergir la mano en el interior, buscando algo.<br />

—Mierda —dijo, jadeando y frustrado—. Me deshice de ellos.<br />

—¿Qué? ¿De todos? —Suspiré.<br />

—Pensé que tú no... Si no estaba contigo, no los necesitaría.<br />

—¡Me estás tomando el pelo! —dije, dejando caer la cabeza contra la<br />

cabecera.<br />

Librosdelcielopersonal.blogspot.com<br />

Página152

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!