27.04.2013 Views

1340232811825

1340232811825

1340232811825

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

— ¿A dónde vas? —Dijo, medio borracho, con una mirada medio<br />

confundida en sus ojos.<br />

—A casa —le contesté toscamente, estirando mi abrigo cuando me soltó.<br />

— ¿Qué estás haciendo aquí?<br />

Yo podía oír el crujido nieve acumulada bajo los pies de América,<br />

mientras caminaba detrás de mí, y Shepley se precipitó escaleras abajo para<br />

quedarse pie detrás de Travis, con los ojos fijos y cautelosos en su novia.<br />

—Lo siento. Si yo hubiera sabido que ibas a estar aquí, no habría venido.<br />

Él se metió las manos en los bolsillos del abrigo. —Puedes venir aquí<br />

cuando quieras, Pidge. Nunca quise que te mantuvieras alejada.<br />

Yo no podía controlar la acidez en mi voz. —No quiero interrumpir. —<br />

Levanté la mirada a lo alto de las escaleras donde Megan estaba parada con<br />

una expresión de suficiencia—. Disfruta de tu noche —dije, dándome la vuelta.<br />

Me agarró del brazo. —Espera. ¿Estás enfadada?<br />

Tiré de mi abrigo para quitarme de su agarre. —Sabes... ni siquiera sé<br />

por qué me sorprende.<br />

Sus cejas se fruncieron. —No puedo ganar contigo. ¡Nunca hago nada<br />

bien contigo! Me dices que tú lo has superado... ¡Me siento malditamente<br />

miserable con esto! Tuve que romper mi teléfono en mil pedazos para evitar<br />

llamarte a cada minuto de cada maldito día. He tenido que aparentar que todo<br />

está bien en la escuela para que puedas ser feliz... ¿Y estás jodidamente<br />

enojada conmigo? ¡Me rompiste el jodido corazón! —Sus últimas palabras<br />

hicieron eco en la noche.<br />

—Travis, estás borracho. Deja que Abby se vaya a casa —dijo Shepley.<br />

Travis me agarró de los hombros y me empujó hacia él. — ¿Me quieres o<br />

no? ¡No puedes seguir haciéndome esto, Pidge!<br />

—No he venido aquí para verte —dije, levantando la mirada hacia él.<br />

—Yo no la quiero —dijo, mirando fijamente mis labios—. Sólo estoy tan<br />

jodidamente triste, Pigeon. —Sus ojos mostraron determinación y se inclinó<br />

hacia adelante, inclinando la cabeza para besarme.<br />

Le agarré por la barbilla, echándole hacia atrás. —Tienes su lápiz labial<br />

en tu boca, Travis —dije, disgustada.<br />

Él dio un paso atrás y se levantó la camisa, limpiándose la boca. Se<br />

quedó mirando fijamente las rayas rojas en el tejido blanco y sacudió la cabeza.<br />

—Yo sólo quería olvidar. Sólo por una maldita noche.<br />

Me sequé una lágrima que se escapó. —Entonces no dejes que te lo<br />

impida.<br />

Librosdelcielopersonal.blogspot.com<br />

Página254

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!