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siempre (le los viles intereses, ansia solo gloria; cada
palma rpie consigue es un nuevo estímulo que enciende
sus deseos y foguea su pasión á la inmortalidad.
Antes de emprender el viage á Italia quiso detener,
se cn Barcelona y visitar las bibliotecas, archivos y
monumentos antiguos que encontrase en las ciudades
y pueblos del tránsito. Luego que estuvo en su inorada
ae dio al trabajo sin descanso: encerrado en las librerías
de los hombres mas sabios, no perdía un solo
momento, y haciendo observaciones criticas y anotaciones
juiciosas , se imponía de dia cn dia mas en el
conocimiento de las lenguas orientales, cultivadas desde
sus primeros años. En este intermedio escribió y
pronunció su oración sobre el Salmo Deus ¡udicium
luitm etc., cn la que se empeñó eu demostrar que por
el nombre 'l'liiirsis et Insulte designaba el santo Bey á
los Monarcas de España. Si hemos de juzgar las obras
de los escritores ilustres con la imparcialidad que conviene
á un historiador, no podemos pasar en silencio
que Bayer se dejó seducir por el amor de la gloria de
su patria y por el deseo de revestir todos los objelos
del prestigio de la antigüedad. Porque leida su obra
Con la detención que se merece , no solo no resulta
probado lo que el autor se propone, sino que salla á
los ojos la ligereza con que falló de un hecho envuelto
en tantas tinieblas, y en que solo se alegan sulilezas
en voz do razones, y congeturas cu ve/, de demostraciones.
Esto en cuanto al asunto; pero la elocuencia
del estilo le dio á conocer cn el Cabildo y le llenó de
aplausos.
Muy distinto es el mérito de otra obra escrita por
el mismo tiempo titulada : índice de lus monedas an-
(fttisaii Aquí so echa de ver toda la erudición de un
sabio, toda la sagacidad de un filósofo y toda la hermosura
en el estilo de un humanista : su lectura obliga
cada momento á pensar en los esfuerzos y paciencia
que necesitaría un solo hombre para recoger tantas
noticias, combinarlas y sacar de ellas las consecuencias