Solemnidad. Inmaculada Concepción de la ... - Autores Catolicos

Época Católica
I-9-
La reforma enérgica de Frey Nicolás de
Ovando.
“Lo que frey de Alcántara don Nicolás de Ovando se
encontró era lo más parecido a una catástrofe general.
La colonia de La Española había fracasado en su
principal objetivo: garantizar su propia subsistencia.
Ovando había traído consigo numerosos gentes de oficio,
herreros, albañiles, artesanos, labradores, etc., pero
era complicado ponerles a trabajar sin tener
avituallamiento. Además los colonos de los anteriores
viajes seguían cerca del estado de insurrección: los
rebeldes más notorios habían sido atrapados por
Bobadilla, pero permanecían numerosos núcleos de
españoles dispersos por la isla. En eso llegó el
terrible huracán que arruinó cualquier esperanza de
proseguir la obra emprendida. En buena medida, Ovando
tenía que empezar desde cero. Pero eso no dejaba de ser
una oportunidad.
“Una de las primeras decisiones fue cambiar el
asentamiento de Santo Domingo. El huracán de 1502 había
dejado la ciudad destrozada. El gobernador decidió
cambiarla al otro lado del río Ozama. Hoy la ciudad de
Santo Domingo sigue estando allí donde la reinstaló.
Además la nueva situación facilitaba la comunicación
con los otros puntos de la isla y estaba más cerca de
las minas y de los propios campos de labranza de los
españoles.
“El gobernador pidió ayuda a García Salas y, con un
cordel, trazó la cuadrícula de la ciudad, como había
visto hacer en Santa Fe de Granada. De algún modo, la
colonización de las Indias era la prolongación natural
de la Reconquista. Como era costumbre, se marcó primero
el lugar de la catedral; después el de la casa de
gobierno; en medio, la plaza; y, a su alrededor, las
calles. Sobre los solares empezaron a levantarse casas.
Nada de hohíos de paja: todas las edificaciones –
impjuso Ovando- debían construirse con materiales
duraderos, porque los españoles habían escarmentado con
el huracán. Es fama que el primer español con asa de
piedra en Santo Domingo se llamaba Francisco de Garay.
El propio Ovando se construyó 15.
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