Solemnidad. Inmaculada Concepción de la ... - Autores Catolicos
Solemnidad. Inmaculada Concepción de la ... - Autores Catolicos
Solemnidad. Inmaculada Concepción de la ... - Autores Catolicos
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
ASCÉTICA<br />
II-2<br />
El alma está para hacerse <strong>de</strong> Dios, para Dios y con<br />
Dios. Y si no es <strong>de</strong>sgraciada. Y en esto consiste <strong>la</strong><br />
gracia, y no sin esto se da <strong>la</strong> gracia <strong>de</strong> <strong>la</strong> misma<br />
<strong>Inmacu<strong>la</strong>da</strong>.<br />
“Serás <strong>de</strong>sgraciado don<strong>de</strong>quiera que estés, a<br />
don<strong>de</strong>quiera que vayas, si no te conviertes a Dios. ¿Por<br />
qué te inquietas cuando no te resulta lo que querías y<br />
<strong>de</strong>seabas? ¿Hay quien tenga todo a su gusto? Nadie: ni<br />
yo, ni tú, ni ningún hombre sobre <strong>la</strong> tierra”. (Kempis,<br />
c. 22: <strong>la</strong> miseria humana).<br />
La gracia es una invitación y una<br />
fuerza a ser templo divino en <strong>la</strong><br />
tierra.<br />
“¡Veis con qué sencillez? –Ecce ancil<strong>la</strong>...” –Y el<br />
Verbo se hizo carne. –Así obraron los santos: sin<br />
espectáculo. Si lo hubo, fue a pesar <strong>de</strong> ellos”.<br />
(Camino, nº 510). La gracia <strong>de</strong> Dio en mí y en ti, sólo<br />
<strong>de</strong>pen<strong>de</strong> <strong>de</strong> un sí, que Dios ya lo dijo, que María<br />
también, sólo faltamos nosotros.<br />
ASCÉTICA<br />
“María, Maestra <strong>de</strong> oración. –Mira cómo pi<strong>de</strong> a su<br />
Hijo, en Caná. Y cómo insiste, sin <strong>de</strong>sanimarse, con<br />
perseverancia. – Y cómo logra. –Apren<strong>de</strong>”. (Camino, nº<br />
502).<br />
El contraste humano que no baja nunca<br />
<strong>de</strong> su andamiaje y siempre es bur<strong>la</strong>do.<br />
Frente a esta maravil<strong>la</strong> <strong>de</strong> misericordia y gracia <strong>de</strong>l<br />
cielo que se nos ofrece por Nuestra Señora, estaba un<br />
mundo ofuscado por lo temporal. Inmenso gentío que no<br />
hace otra cosa que adorar con toda su alma y todas sus<br />
fuerzas cosas <strong>de</strong> tierra, huyendo <strong>de</strong> Dios. Y así lo<br />
confesaban algunos <strong>de</strong> ellos, raza inextinguible: “Nos<br />
quiere hacer creer en semejantes supersticiones en el<br />
siglo XIX”. La dureza humana y su ido<strong>la</strong>tría no es cosa<br />
pasada, es cosa que ronda siempre al alma humana. Algún<br />
sabio dijo que el hombre <strong>de</strong> siempre es un atrevido que<br />
185