Boletín PAUTAS Especial DE PSIQUIATRIA Sociedad <strong>de</strong> Psiquiatría y Neurología <strong>de</strong> <strong>la</strong> Infancia y Adolescencia Año 14, Noviembre 2003Trastorno bipo<strong>la</strong>r (TB) en niños y adolescentesDra. Esperanza HabingerDefiniciónEl TB es una enfermedad mental grave cuyodiagnóstico, particu<strong>la</strong>rmente en niños, constituyeun <strong>de</strong>safío clínico. Su curso longitudinalse caracteriza por episodios recurrentes <strong>de</strong><strong>de</strong>presión, manía, síntomas mixtos y/o hipomanía.Estos episodios causan variacionesinusuales y extremas en el ánimo, energía yconducta, lo que interfiere significativamentecon el funcionamiento.Epi<strong>de</strong>miología y ComorbilidadExiste evi<strong>de</strong>ncia que sugiere que el TB pue<strong>de</strong>ser tan común en niños y adolescentes comoen adultos. La prevalencia <strong>de</strong>l TB en unamuestra <strong>de</strong> <strong>la</strong> comunidad en EEUU (14 a 18años) alcanzó el 1%; un 5.7% adicional teníasíntomas anímicos que cumplían criterios <strong>de</strong> TBno especificado (TB sub-sindromático). Noexisten datos nacionales. El TB <strong>de</strong> inicio en <strong>la</strong><strong>infancia</strong> o adolescencia temprana frecuentementese caracteriza por estados sintomatológicosmixtos, <strong>de</strong> curso continuo, con ciclosrápidos que pue<strong>de</strong>n cursar con <strong>de</strong>sór<strong>de</strong>nesconductuales, particu<strong>la</strong>rmente con el trastornopor déficit atencional con hiperactividad (TDAH)o el trastorno <strong>de</strong> conducta. Más complicado aúnes que pue<strong>de</strong>n tener <strong>la</strong>s características <strong>de</strong> estostrastornos como síntomas iniciales, aspecto quepue<strong>de</strong> llevar a graves confusiones diagnósticas.Es <strong>de</strong>stacable también su asociación con otrostrastornos psiquiátricos como abuso <strong>de</strong>sustancias y/o alcohol, trastornos ansiosos y <strong>de</strong>l<strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong> <strong>la</strong> personalidad.DiagnósticoEl diagnóstico <strong>de</strong> TB se realiza cuando estánpresentes los síntomas <strong>de</strong>l estado maníaco/mixto requeridos por el DSM-IV. El TB I secaracteriza por uno o más episodios maníacoso mixtos, habitualmente acompañados porepisodios <strong>de</strong>presivos mayores. El TB II secaracteriza por uno o más episodios <strong>de</strong>presivosmayores acompañados al menos por unepisodio hipomaníaco. Los síntomas maníacosincluyen: ánimo extremadamente alto o irritable,que dura al menos una semana, y tres o más<strong>de</strong> los siguientes síntomas: grandiosidad,escasa necesidad <strong>de</strong> sueño, verborrea, fuga <strong>de</strong>i<strong>de</strong>as o pensamiento acelerado, distractibilidad,hipersexualidad, agitación física, conductasarriesgadas. El episodio hipomaníaco tiene losmismos síntomas que el maníaco, pero <strong>la</strong>alteración no es tan grave y su duración mínimaes <strong>de</strong> 4 días. Los síntomas <strong>de</strong>presivos incluyencinco o más <strong>de</strong> los siguientes síntomas, duranteal menos dos semanas: ánimo bajo persistenteo irritable o <strong>de</strong>sinterés por activida<strong>de</strong>sp<strong>la</strong>centeras (uno <strong>de</strong> estos <strong>de</strong>be estar presente);cambios significativos en el apetito, peso ysueño; falta <strong>de</strong> energía; culpa inapropiada;distractibilidad; i<strong>de</strong>as <strong>de</strong> muerte o suicidio. Elepisodio mixto se caracteriza por síntomasmaníacos y <strong>de</strong>presivos durante al menos unasemana. Es importante <strong>de</strong>stacar que algunosniños cumplen los criterios establecidos por elDSM-IV para TB I o TB II, pero otros sufren <strong>de</strong>perturbaciones anímicas, algunos síntomas <strong>de</strong>TB y presentan grave alteración funcional (TBno especificado) sin cumplir todos los criteriospara TB I o II. Existe evi<strong>de</strong>ncia que este grupotambién se beneficiaría <strong>de</strong> <strong>la</strong>s intervencionesterapéuticas para el TB. A diferencia <strong>de</strong> losadultos, los niños y adolescentes maníacos sonmás propensos a ser irritables y a presentarpataletas <strong>de</strong>structivas que a estar eufóricos.Cuando se <strong>de</strong>primen, pue<strong>de</strong>n tener quejasfísicas, rechazo esco<strong>la</strong>r o mal rendimiento,ansiedad <strong>de</strong> separación, ais<strong>la</strong>miento social yextrema sensibilidad al rechazo o fracaso. Otrasmanifestaciones <strong>de</strong> estados <strong>de</strong>presivos omaníacos pue<strong>de</strong>n incluir el abuso <strong>de</strong> alcohol osustancias y <strong>la</strong> dificultad re<strong>la</strong>cional.8
Trastorno bipo<strong>la</strong>r (TB) en niños y adolescentesEsperanza HabingerEs importante enfatizar que el 20-30% <strong>de</strong> <strong>la</strong>s<strong>de</strong>presiones <strong>de</strong>l niño o <strong>de</strong>l adolescenteevolucionarán a enfermedad bipo<strong>la</strong>r. Lassiguientes características <strong>de</strong>l episodio <strong>de</strong>presivo,son sugerentes <strong>de</strong> evolución a bipo<strong>la</strong>ridad:comienzo brusco, síntomas psicóticos, enlentecimientopsicomotor, hipomanía inducida poranti<strong>de</strong>presivos, antece<strong>de</strong>ntes <strong>de</strong> TB en <strong>la</strong>familia. La evaluación en este grupo etarioincluye: presencia <strong>de</strong> comorbilidad, informaciónesco<strong>la</strong>r, funcionamiento neuropsicológico,evaluación física, estresores biopsico-sociales,historia y funcionamiento familiar. Una historiafamiliar <strong>de</strong> TB constituye un factor <strong>de</strong> riesgo parael <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong> <strong>la</strong> enfermedad, por tratarse <strong>de</strong>una patología altamente heredable. Laevaluación médica <strong>de</strong>biera incluir: EEG, TAC,hemograma, exámenes <strong>de</strong> funcionamientorenal y hepático, pruebas tiroí<strong>de</strong>as, test <strong>de</strong>embarazo, exámenes toxicológicos.Diagnóstico DiferencialLas siguientes condiciones psiquiátricas <strong>de</strong>benser diferenciadas <strong>de</strong>l TB: esquizofrenia,trastorno esquizoafectivo y otras psicosis,trastornos afectivos orgánicos, trastornos <strong>de</strong>conducta, TDAH, trastorno limítrofe <strong>de</strong>personalidad, trastorno por estrés posttraumático.Las siguientes condiciones médicaspue<strong>de</strong>n mimetizar un TB: abuso <strong>de</strong> sustanciaso síntomas <strong>de</strong> <strong>de</strong>privación (anfetaminas,cocaína, inha<strong>la</strong>ntes); medicamentos (maníainducida por anti<strong>de</strong>presivos, simpaticomiméticos,estimu<strong>la</strong>ntes y/o corticoi<strong>de</strong>s); trastornosneurológicos (tumores cerebrales, infecciones<strong>de</strong>l SNC (HIV), esclerosis múltiple, epilepsia <strong>de</strong>llóbulo temporal, síndrome Kleine-Levin);condiciones metabólicas (hipertiroidismo,uremia, enfermedad <strong>de</strong> Wilson, enfermeda<strong>de</strong>s<strong>de</strong>l colágeno, <strong>de</strong>lirium).Es particu<strong>la</strong>rmente complejo el diagnósticodiferencial con TDAH, <strong>especial</strong>mente siconsi<strong>de</strong>ramos que a<strong>de</strong>más ambos se asociancon frecuencia. Un niño que parece <strong>de</strong>primidoy exhibe síntomas tipo TDAH severos, con altaexplosividad y cambios anímicos en asociacióna historia familiar <strong>de</strong> TB, es altamente sugerente<strong>de</strong> TB. En contraste, el TB <strong>de</strong>l adolescentetardío tien<strong>de</strong> a comenzar más abruptamente,frecuentemente con un episodio maníacoclásico y a tener un patrón más episódico.TratamientoEl mo<strong>de</strong>lo terapéutico indicado es multimodalpor lo que los psicofármacos <strong>de</strong>ben ser usadosen conjunción con estrategias psicoeducacionales,intervenciones <strong>de</strong> apoyo y psicoterapéuticasindividuales y familiares, programaeducacionales y servicio <strong>de</strong> apoyo <strong>de</strong> <strong>la</strong>comunidad.Psicofarmacología. Para los síntomas <strong>de</strong>manía aguda o mixtos, el litio y el valproato son<strong>de</strong> primera elección. La carbamazepina seríamenos efectiva. Durante <strong>la</strong> fase aguda pue<strong>de</strong>ser necesario asociar un antipsicótico obenzodiazepina. Antes <strong>de</strong> cambiar <strong>de</strong> agenteantimaníaco o asociar otro, <strong>de</strong>be esperarse almenos 4 a 6 semanas con dosis y nivelesterapéuticos a<strong>de</strong>cuados. Los niveles terapéuticosy <strong>la</strong> monitorización <strong>de</strong> éste sigue losmismos criterios que para el adulto. Ante <strong>la</strong>presencia <strong>de</strong> síntomas <strong>de</strong>presivos agregaranti<strong>de</strong>presivos (asociados al o los estabilizantes)sólo si <strong>la</strong> fase persiste o es severa, porel riesgo <strong>de</strong> inducir un episodio maníaco. Laduración <strong>de</strong> <strong>la</strong> terapia <strong>de</strong> mantención no estáaún c<strong>la</strong>ramente <strong>de</strong>finida. Un estudio en adolescentessugiere que <strong>de</strong>be mantenerse al menos18 meses <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> <strong>la</strong> estabilización pero, engeneral, <strong>de</strong>biera ser a muy <strong>la</strong>rgo p<strong>la</strong>zo. Algunospacientes lo requerirán <strong>de</strong> por vida. Los efectosa <strong>la</strong>rgo p<strong>la</strong>zo <strong>de</strong>l litio en niños y adolescentesno han sido estudiados. Cuando el paciente estáclínicamente estable <strong>de</strong>be intentarse suspen<strong>de</strong>rlos psicofármacos asociados en el episodioagudo (neurolépticos atípicos, benzodiazepinas).Cuando existe recidiva sintomatológicay el paciente no está respondiendo al agenteestabilizante (en niveles a<strong>de</strong>cuados) se cambiaráo asociará con otro. En aquellos pacientescon comorbilidad con TDAH se sugiere usar unestabilizador y posteriormente asociar agentespsicofarmacológicos específicos <strong>de</strong>l TDAH.En los casos resistentes a fármacos o <strong>de</strong>presiónpsicótica severa y/o catatonía, hay reportes <strong>de</strong>casos ais<strong>la</strong>dos <strong>de</strong> tratamientos exitosos conterapia electroconvulsiva, pero no hay estudiossistemáticos en niños y adolescentes.9