11.07.2015 Views

El futuro de la economía española - Coag

El futuro de la economía española - Coag

El futuro de la economía española - Coag

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

EL PASADO ENERGÉTICO ESPAÑOL COMO EXPLICACIÓN DEL ÚNICO FUTURO POSIBLE PARA ÉL /JUAN VELARDE FUERTESentonces se experimentó, carecía «<strong>de</strong> antece<strong>de</strong>ntes estadísticos en <strong>la</strong> historia <strong>de</strong> nuestrosríos», pero también se <strong>de</strong>bía a que los aprovechamientos útiles eran aún escasos para el cuadro<strong>de</strong> nuevas <strong>de</strong>mandas <strong>de</strong> los sectores productivos y <strong>de</strong> los consumidores.Nada se podía avanzar sin una <strong>de</strong>cidida política inversora. Pero progresar en el<strong>la</strong> no eraposible sin una a<strong>de</strong>cuada financiación <strong>de</strong>l proceso <strong>de</strong> capitalización real. Por eso se ve obligadoal estudiar esta situación el profesor Enrique Becerril en su artículo «La crisis <strong>de</strong> <strong>la</strong> industriaeléctrica», publicado en Moneda y Crédito, en marzo <strong>de</strong> 1946, a observar «el ritmo al que <strong>la</strong>sempresas han venido constituyendo sus fondos <strong>de</strong> amortización y reserva». <strong>El</strong> resultado lo encuentra«altamente aleccionador y ciertamente que <strong>de</strong> él «no pue<strong>de</strong> <strong>de</strong>ducirse una impresiónoptimista». La raíz se encuentra, repitámoslo, en <strong>la</strong> política <strong>de</strong> tarifas. Para no agrandar <strong>la</strong> situacióninf<strong>la</strong>cionista, se frena <strong>la</strong> subida <strong>de</strong> <strong>la</strong>s mismas con un resultado muy preocupante: «el ritmomedio <strong>de</strong> <strong>la</strong> amortización <strong>de</strong> nuestra industria eléctrica ha sido <strong>de</strong>l or<strong>de</strong>n <strong>de</strong>l 0’7 por 100 anualso<strong>la</strong>mente, y en el periodo actual, notorio el <strong>de</strong>sequilibrio entre los precios <strong>de</strong> venta y los costes<strong>de</strong> producción, muchas compañías se han visto obligadas a anu<strong>la</strong>r en sus ba<strong>la</strong>nces <strong>de</strong> pérdidasy ganancias <strong>la</strong> partida <strong>de</strong>dicada a amortizaciones». No podía servir <strong>de</strong> alivio a esto el que sehab<strong>la</strong>se «<strong>de</strong> <strong>la</strong>s reservas implícitas correspondientes a <strong>la</strong> supervaloración <strong>de</strong> <strong>la</strong>s inversionesllevadas a cabo con índices <strong>de</strong> precios más favorables, a menos que el rendimiento económicofuera corregido por los mismos índices, cosa hoy bien alejada <strong>de</strong> <strong>la</strong> realidad».Este p<strong>la</strong>nteamiento <strong>de</strong>be, casi inmediatamente, completarse con otro, <strong>de</strong>l que es autorAntonio Becerril y Antón-Miralles. Se titu<strong>la</strong>ba «<strong>El</strong> proceso <strong>de</strong> amortización en <strong>la</strong> industria eléctricaespaño<strong>la</strong>», y apareció en Moneda y Crédito, en septiembre <strong>de</strong> 1946 28 .Ahí se encuentra una <strong>de</strong> <strong>la</strong>s principales raíces <strong>de</strong> <strong>la</strong>s restricciones <strong>de</strong> 1944, 1945 y, algo<strong>de</strong>spués, <strong>la</strong>s <strong>de</strong> 1949. Los trastornos fueron colosales. La exteriorización se verificó en forma <strong>de</strong>restricciones eléctricas. Para observar mejor lo que esto significó, es preciso echar mano <strong>de</strong> unestudio muy valioso <strong>de</strong> Castañeda y Redonet sobre el impacto <strong>de</strong> <strong>la</strong>s restricciones eléctricas en<strong>la</strong> economía españo<strong>la</strong> 29 . Comienzan por preguntarse si los resultados obtenidos no son exageradoscuando se emplea una tab<strong>la</strong> <strong>de</strong> insumo-producto, o input-output, para cuantificar <strong>la</strong>s consecuencias<strong>de</strong> <strong>la</strong>s restricciones eléctricas. Por eso, seña<strong>la</strong>n, es preciso tener en cuenta <strong>la</strong> e<strong>la</strong>sticidad<strong>de</strong> reemp<strong>la</strong>zamiento <strong>de</strong> <strong>la</strong> energía eléctrica, lo que permite afirmar a Castañeda y Redonetque aunque <strong>la</strong>s restricciones eléctricas no consiguen reducir <strong>la</strong> producción en <strong>la</strong> misma medida,lo difícil <strong>de</strong> reemp<strong>la</strong>zar <strong>de</strong> esta energía, motiva que este estudio haya <strong>de</strong> insistir en su especialísimaimportancia 30 .12128Moneda y Crédito (18); pp. 36-46.29Cfr. José CASTAÑEDA y José Luis REDONET (1960): Inci<strong>de</strong>ncia <strong>de</strong> <strong>la</strong>s restricciones eléctricas sobre <strong>la</strong> economía nacional,resumen <strong>de</strong>l trabajo que obtuvo el primer premio en el concurso abierto por Unidad <strong>El</strong>éctrica, SA. Unesa, con ocasión <strong>de</strong> <strong>la</strong>sreuniones celebradas por <strong>la</strong> Sección Parcial <strong>de</strong> Madrid <strong>de</strong> <strong>la</strong> Conferencia Mundial <strong>de</strong> <strong>la</strong> Energía.30Íbi<strong>de</strong>m, p. 2.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!