Migraciones indígenas - IIDH
Migraciones indígenas - IIDH
Migraciones indígenas - IIDH
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
Consulta especializada sobre migraciones <strong>indígenas</strong><br />
sexual que también ha sido llevado a la República Dominicana. Otra culpa se le atribuye a la mujer, que<br />
la familia dominicana se está desintegrando, porque la mujer deja su familia, deja de ser la columna<br />
de la familia.<br />
Entonces en ese contexto se puede preguntar ¿hasta qué punto y cómo la feminización de ciertos<br />
flujos migratorios necesariamente se puede traducir en nuevas estructuras familiares? ¿Es cierto que si<br />
analizamos la migración masculina masiva de ecuatorianos y peruanos no existe un discurso sobre la<br />
desintegración familiar? El hombre se va para facilitar o para jugar su papel tradicional de proveedor de<br />
la familia, por lo que entonces su ausencia sí puede ser problemática emocionalmente pero su migración<br />
no es causa de desintegración familiar. Cuando la mujer se va, es otra cosa.<br />
La construcción de la migración femenina, como un problema grave, tiene que ver con el concepto<br />
de familia, y tiene muy poco que ver con familias reales existentes. Hemos entrevistado a más de 500<br />
mujeres en Europa sobre desintegración familiar y siempre hemos usado un punto de vista un poco<br />
histórico, no solamente hablar sobre lo que ocurrió en el momento de migrar, sino también cuál era<br />
la historia antes de tomar la decisión. En el 80% de los casos, la desintegración familiar ocurrió antes<br />
de la migración. Entonces la mujer tiene que irse porque el hombre se ha ido, o el hombre no participa<br />
económicamente en la crianza de los hijos. La mujer mantiene su rol de proveedora pero ya a escala<br />
internacional.<br />
No se puede decir que la estructura familiar cambia necesariamente por la migración. En esto<br />
inciden las leyes, las políticas de los países. Por ejemplo, varios países europeos introdujeron leyes<br />
para permitir el ingreso de migrantes latinoamericanos. La manera más fácil de entrar es casarse con<br />
un europeo, los matrimonios son un negocio grande, aunque también existe matrimonio de amor. Al<br />
analizar la desintegración familiar se deben estudiar profundamente estos procesos que vienen de las<br />
prácticas de los migrantes, pero también los procesos que son reforzados por políticas estatales.<br />
El migrante es visto como héroe económico, por la captura de la remesa, el voto del exterior, la<br />
incorporación del migrante en EEUU. Las comunidades que tienen clase media fuera de los países<br />
de origen son incorporadas en el proceso de ampliar la nación. Los colombianos y dominicanos en<br />
Nueva York son parte de la patria. Participan con su voto y hacen asociaciones y acuerdos al estilo<br />
de los mexicanos. Hemos estudiado hasta qué punto las mujeres en Europa han tratado de copiar este<br />
proceso para hacerse visibles en lo Estados emisores, organizando, colectando fondos para mandar a<br />
proyectos distintos para votar, porque son mujeres políticas. Pero no han logrado ser reconocidas en<br />
los Estados. ¿Por qué? La mujer es clave en la construcción de la familia, y la familia es central en la<br />
construcción de la nación y la patria, como la cuna de la identidad nacional dominicana. Si una mujer<br />
se separa de esta imagen, es muy difícil se reincorpore en el proceso.<br />
Entrevistamos a hijos que quedaron en el país de origen y los hijos después de un tiempo de reunión<br />
con sus madres en Europa. Las dos situaciones son difíciles y hay muchos problemas. La cuestión es<br />
saber si el problema proviene de la migración de la mujer o tiene otras causas. Entrevistando a grupos<br />
focales en la República Dominicana con hijos entre 14 y 18 años, ellos tienen la visión de la migración<br />
como el dolor de “en parir”, explican en términos o conceptos demasiado adultos. Que la mujer se va<br />
porque no participan, porque los padres no participan, que no hay desarrollo. Como un discurso político<br />
que no logran hablar de emociones. Ése es el dolor.<br />
En Europa, para los hijos a sido difícil incorporarse especialmente en países donde el español no es<br />
el idioma principal. Hemos entrevistado a las mujeres migrantes sobre que ocurrió en su pasado, como<br />
fueron sus infancias. Lo interesante es que casi ninguna de estas mujeres vivieron con sus padres. Donde<br />
vivían con sus padres, la pobreza y la marginalidad nunca daba la posibilidad de estar juntos. No es un<br />
proceso nuevo, es ya un proceso globalizado que las mujeres se van más lejos para tener acceso a los<br />
recursos, para pagar los costos de la vida.<br />
113