18.05.2015 Views

http://Rebeliones.4shared.com

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

elativo al bien <strong>com</strong>ún o al interés <strong>com</strong>partido? Este es el<br />

sentido que está en juego en la caracterización que hace Habermas<br />

de la esfera pública burguesa <strong>com</strong>o un espacio en el<br />

que el tema de la discusión se restringe al "bien <strong>com</strong>ún" y<br />

donde se excluye la discusión de "intereses privados".<br />

Se trata de una concepción de la esfera pública que hoy<br />

en día llamaríamos republicana cívica, en oposición a una<br />

concepción liberal individualista. En síntesis, el modelo republicano<br />

cívico pone énfasis en una visión de la política<br />

<strong>com</strong>o un conjunto de personas que razonan juntas para promover<br />

un bien <strong>com</strong>ún, que trasciende la mera suma de las<br />

preferencias individuales. La idea es que, a través de la deliberación,<br />

los miembros del público pueden llegar a descubrir<br />

o crear este bien <strong>com</strong>ún. En el transcurso de sus deliberaciones,<br />

los participantes, inicialmente un conjunto de individuos<br />

egoístas, se convierten en una colectividad con espíritu<br />

público, capaz de actuar conjuntamente en aras del interés<br />

<strong>com</strong>ún. Desde esta perspectiva, los intereses privados no encuentran<br />

un lugar apropiado en la esfera pública política. En<br />

el mejor de los casos, pueden ser considerados <strong>com</strong>o el punto<br />

de partida prepolítico de la deliberación, que debe ser<br />

transformado y trascendido en el transcurso del debate 37 .<br />

Ahora bien, esta concepción cívico-republicana de la esfera<br />

pública representa, en cierto sentido, un avance frente a<br />

la alternativa liberal individualista. A diferencia de esta última,<br />

no supone que las preferencias, intereses e identidades<br />

de las personas estén dadas exógenamente, con anterioridad<br />

al discurso y a la deliberación públicos. Considera más bien<br />

que las preferencias, intereses e identidades son tanto resultados<br />

<strong>com</strong>o antecedentes de la deliberación pública; es más,<br />

que se constituyen en y a través de ella. Sin embargo, tal<br />

<strong>com</strong>o lo argumenta Jane Mansbridge, la concepción cívicorepublicana<br />

incluye una grave confusión, que elimina su<br />

fuerza crítica. Esta concepción confunde las ideas de delibe-<br />

37 El modelo liberal-individualista, por el contrario, hace énfasis en una concepción<br />

de la política <strong>com</strong>o agregado de preferencias individuales y egoístas. La<br />

deliberación, en sentido estricto, se elimina. El discurso político consiste más<br />

bien en el registro de preferencias individuales y en negociaciones mediante la<br />

cuales se buscan fórmulas para satisfacer tantos intereses privados <strong>com</strong>o sea<br />

posible. Se presume que no existe el bien <strong>com</strong>ún, <strong>com</strong>o algo distinto y superior<br />

a la suma de los diferentes bienes individuales, y por eso los intereses<br />

privados son la materia legítima del discurso político.<br />

124

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!