http://Rebeliones.4shared.com
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
EL MODELO DEL PROVEEDOR UNIVERSAL<br />
En una de las concepciones de la sociedad postindustrial,<br />
la época del salario familiar daría paso a la época del Proveedor<br />
Universal. Esta es la concepción implícita en la práctica<br />
política actual de la mayoría de las feministas y de los liberales<br />
norteamericanos. (¡Era también la que se suponía en los<br />
antiguos países <strong>com</strong>unistas!) Pretende lograr la equidad de<br />
género principalmente mediante la promoción del empleo femenino.<br />
Su objetivo fundamental es capacitar a las mujeres<br />
de manera que puedan mantenerse y mantener a sus familias<br />
con su propio salario. En síntesis, debe unlversalizarse<br />
el rol del proveedor, de tal forma que las mujeres también<br />
sean ciudadanos-trabajadores.<br />
El escenario postindustrial del Proveedor Universal es<br />
bastante ambicioso, pues requiere grandes programas y políticas<br />
nuevas. Un elemento crucial es el de establecer un conjunto<br />
de servicios de capacitación para el empleo, tales <strong>com</strong>o<br />
guarderías y hogares para ancianos, dirigidos a liberar a las<br />
mujeres de sus responsabilidades no remuneradas, con el<br />
fin de que puedan asumir empleos de tiempo <strong>com</strong>pleto en<br />
términos <strong>com</strong>parables a los de los hombres 26 . Otro elemento<br />
esencial consiste en introducir una serie de reformas en los<br />
lugares de trabajo que eliminen los obstáculos a la igualdad<br />
de oportunidades, tales <strong>com</strong>o la discriminación por sexo y el<br />
acoso sexual. No obstante, reformar los sitios de trabajo exige<br />
reformar la cultura —eliminar los estereotipos sexistas y<br />
romper la asociación cultural del papel de proveedor con lo<br />
masculino. Se necesitan asimismo políticas orientadas a<br />
contribuir a los cambios en la socialización, de modo que,<br />
primero, se reorienten las aspiraciones de las mujeres hacia<br />
26 Los servicios que capacitarían para el empleo podrían ser distribuidos de<br />
acuerdo con la necesidad, el mérito o la ciudadanía, pero es este último criterio<br />
el que mejor se ajusta al espíritu del modelo. Las guarderías acordes con<br />
los recursos dirigidas a los pobres, no pueden sino representar un fracaso en<br />
la consecución de la posición genuina de proveedor; y las guarderías que se<br />
asignaran de acuerdo con el mérito implican un círculo vicioso: es preciso<br />
estar empleado para conseguir lo que se necesita para emplearse. En consecuencia,<br />
el criterio de la ciudadanía es el mejor, pero debe garantizar que el<br />
servicio esté al alcance de todos. Esto excluye las disposiciones suecas al<br />
respecto, que no garantizan suficientes cupos en las guarderías y están plagadas<br />
por largas listas de espera. El problema sueco es discutido en Barbara<br />
Hobson, "Welfare Policy Regimes, Solo Mothers, and the Logics of Gender". en<br />
Diane Sainsbury, <strong>com</strong>p., Gendering Welfare States, Londres, Sage, 1994.<br />
73