You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
22<br />
inspector Hackett, en cierto sentido es parecido. Esto es lo<br />
que me gusta de estos muchachos: son como nosotros. Un<br />
poco estúpidos, algo vagos, ineficaces… Nunca podrían<br />
tener las cualidades de un Sherlock Holmes, simplemente<br />
porque los seres humanos no somos así. Algún día me<br />
gustaría escribir una novela con Holmes como protagonista,<br />
donde llega a una larga explicación para explicar la<br />
resolución de un caso, cuando en realidad las bases sobre<br />
la que se asentaba el mismo son muy simples.<br />
La mirada del artista hace que un<br />
objeto se sonroje, y al sonrojarnos<br />
alcanzamos nuestro estado máximo de<br />
conciencia propia, de vulnerabilidad.<br />
–¿Es cierto que proyecta escribir una historia sin trama?<br />
Sí, en verdad es algo que me gustaría mucho intentar,<br />
aunque no estoy muy seguro de cómo lograrlo. Pero estoy<br />
algo cansado de las tramas. Muchas veces me han comentado<br />
respecto a algunas de las novelas que firma Banville:<br />
“Ah, pero esto no tiene trama”. Mi respuesta es simple:<br />
“¿Pero la vida tiene trama?”. La vida es eso que transcurre<br />
a la deriva. Todas las decisiones las tomamos así, sin una<br />
certeza definitiva, resignados a dejarnos llevar por imprevistos<br />
o malas elecciones. Cuando nos acercamos al final,<br />
como en mi caso, vemos que sólo en escasos momentos<br />
fuimos dueños absolutos de nuestras decisiones. La mayor<br />
de las veces optamos por ellas según nos llevara el viento<br />
de la vida. A la deriva… Pero bueno, debemos agradecer<br />
que esto sea así: basta con imaginar lo que serían nuestros<br />
destinos si estuvieran por completo en nuestras manos.<br />
Ante el accidente que es la vida, andar a la deriva nos protege<br />
de estar decidiendo por nosotros mismos.<br />
La vida es eso que transcurre a la<br />
deriva. Todas las decisiones las tomamos<br />
así, sin una certeza definitiva, resignados<br />
a dejarnos llevar por imprevistos o<br />
malas elecciones. Cuando nos acercamos<br />
al final, como en mi caso, vemos que<br />
sólo en escasos momentos fuimos dueños<br />
absolutos de nuestras decisiones.<br />
–En su opinión, ¿cuál sería la verdad de la ficción?<br />
Oh, no lo sé… Y si lo supiera, no necesitaría escribir más<br />
libros