23.07.2020 Views

La Historia de la Redención - Elena G. de White

  • No tags were found...

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

de eruditos, además de los miembros regulares del concilio, fueron

convocados también, y deliberaron juntos en cuanto a lo que se podía hacer

con estos perturbadores de la paz. "Mas un ángel del Señor, abriendo de

noche las puertas de la cárcel y sacándolos, dijo: Id, y puestos en pie en el

templo anunciad al pueblo todas las palabras de esta vida. Habiendo oído

esto, entraron de mañana en el templo, y enseñaban".

Cuando los apóstoles aparecieron entre los hermanos y les contaron

cómo los había conducido el ángel directamente entre los soldados que

guardaban la prisión y les habían dado orden de reasumir la tarea que había

sido interrumpida por los sacerdotes y gobernantes, aquéllos se llenaron de

gozo y asombro.

Los sacerdotes y gobernantes reunidos en concilio decidieron acusarlos

de insurrección y de asesinar a Ananías y Safira (Hechos 5:1-11), y de

conspirar para privar a los sacerdotes de su autoridad y darles muerte.

Confiaban en que la muchedumbre se sentiría entusiasmada para tomar el

asunto en sus manos y tratar a los apóstoles como habían tratado a Jesús.

Eran conscientes de que muchos de los que no habían aceptado la doctrina de

Cristo estaban cansados con el gobierno arbitrario de las autoridades judías y

ansiosos de que se produjera algún cambio definido. Si estas personas

llegaban a interesarse en las creencias de los apóstoles, y las aceptaban, y

reconocían a Jesús como Mesías, temían que la ira de todo el pueblo se

suscitara contra los sacerdotes, y los hicieran responsables del asesinato de

Cristo. Decidieron tomar medidas enérgicas para impedirlo. Finalmente

mandaron comparecer ante ellos a los supuestos prisioneros. Grande fue su

asombro cuando recibieron el informe de que las puertas de la prisión

estaban firmemente cerradas, que los guardias estaban en su sitio, pero que a

los prisioneros no se los podía encontrar por ninguna parte.

Pronto llegó el informe: "He aquí, los varones que pusisteis en la cárcel

están en el templo, y enseñan al pueblo". Aunque los apóstoles fueron

224

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!