Cartas 60-212 - Carmelo - Santa Teresa de Jesus
Cartas 60-212 - Carmelo - Santa Teresa de Jesus
Cartas 60-212 - Carmelo - Santa Teresa de Jesus
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
4 Im II,11,4.<br />
5 Im III,49,7; cf Cta 176 y Ms A 71rº.<br />
Cta 146 A la señora <strong>de</strong> Guérin<br />
J.M.J.T.<br />
Jesús + El <strong>Carmelo</strong>, 10 <strong>de</strong> agosto <strong>de</strong> 1893<br />
Querida tía:<br />
Inicio<br />
He visto gustosa cómo usted supo leer en el corazón <strong>de</strong> su hijita. No quiero, sin embargo,<br />
que mi hermosa letra pierda el honor <strong>de</strong> ser admirada en el castillo <strong>de</strong> La Musse... Por<br />
eso me he sentido muy feliz cuando nuestra Madrecita me confió la dulce misión <strong>de</strong><br />
contestar a su carta.<br />
Querida tía, todas y cada una <strong>de</strong> las líneas que nos ha escrito me revelan su corazón, que<br />
es el [1vº] <strong>de</strong> la más tierna <strong>de</strong> las madres. Pero también el <strong>de</strong> su Teresita es un corazón<br />
<strong>de</strong> hija, lleno <strong>de</strong> amor y <strong>de</strong> gratitud...<br />
Pido a Dios que cure a mi querido tío 1 . Y la verdad es que me parece que esta súplica no<br />
pue<strong>de</strong> <strong>de</strong>jar <strong>de</strong> ser escuchada, puesto que Nuestro Señor mismo está interesado en esa<br />
curación. ¿No trabaja, acaso, el brazo <strong>de</strong> mi tío, escribiendo incansablemente páginas<br />
admirables, <strong>de</strong>stinadas a salvar almas y a hacer temblar a los <strong>de</strong>monios 2 ?<br />
Creo que Dios nos está escuchando ya, y espero que disfruten en paz <strong>de</strong> los últimos días<br />
que les [2rº] quedan por pasar en su hermoso castillo 3 . ¡Qué feliz <strong>de</strong>be <strong>de</strong> sentirse Juana<br />
al po<strong>de</strong>r gozar a sus anchas <strong>de</strong> la presencia <strong>de</strong> Francis, al que tiene tan poco a su lado en<br />
Caen 4 ! He rezado mucho para que <strong>de</strong>saparezca por completo ese dichoso esguince, pues<br />
tiene que ser un negro nubarrón en el azul <strong>de</strong>l cielo <strong>de</strong> mi Juana.<br />
Me acuerdo también <strong>de</strong> mi hermanita María. Me parece que <strong>de</strong>s<strong>de</strong> que plantó su morada<br />
en las copas <strong>de</strong> los árboles 5 , yo le <strong>de</strong>bo <strong>de</strong> parecer muy pequeña y <strong>de</strong>spreciable. Cuando<br />
uno se acerca al cielo, <strong>de</strong>scubre maravillas que no existen en [2vº] los humil<strong>de</strong>s valles. Me<br />
llamará mala, pero eso no me impedirá ofrecer la sagrada comunión por Su Alteza el día<br />
<strong>de</strong> su santo...<br />
No acierto a expresarle, querida tía, lo feliz que me siento cuando pienso que mi querido<br />
papaíto está con uste<strong>de</strong>s, ro<strong>de</strong>ado <strong>de</strong> cariño y <strong>de</strong> cuidados. Dios ha hecho con él lo<br />
mismo que con su servidor Job: <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> haberlo humillado lo colma <strong>de</strong> favores, y<br />
todos esos bienes y ese cariño le llegan por medio <strong>de</strong> uste<strong>de</strong>s.<br />
Querida tiíta, tengo todavía muchas cosas que <strong>de</strong>cirle, pero no me queda espacio, y no es<br />
respetuoso terminar así [2vºtv] una carta escribiendo <strong>de</strong> través. Perdóneme, querida tía, y<br />
ojalá sepa intuir todo lo que quisiera escribirle, lo mismo que al resto <strong>de</strong> la familia.