08.05.2013 Views

Cartas 60-212 - Carmelo - Santa Teresa de Jesus

Cartas 60-212 - Carmelo - Santa Teresa de Jesus

Cartas 60-212 - Carmelo - Santa Teresa de Jesus

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

13 El abate Bellière.<br />

Cta 202 A la señora <strong>de</strong> Guérin<br />

J.M.J.T.<br />

Jesús + 16 <strong>de</strong> noviembre <strong>de</strong> 1896<br />

Querida tía:<br />

Inicio<br />

Es muy triste para su hijita tener que confiar a una fría pluma la misión <strong>de</strong> expresarle los<br />

sentimientos <strong>de</strong> su corazón... Tal vez me diga, sonriendo: «Pero, Teresita <strong>de</strong> mi alma,<br />

¿me los expresarías más fácilmente con palabras...?» Querida tía, tengo que confesarlo,<br />

no, es verdad, no encuentro palabras que puedan expresar satisfactoriamente los <strong>de</strong>seos<br />

<strong>de</strong> mi corazón. El poeta que se atrevió a <strong>de</strong>cir:<br />

«Lo que bien se concibe claramente se enuncia;<br />

para expresarlo,<br />

las palabras acu<strong>de</strong>n fácilmente» 1 ,<br />

ese poeta, digo, ¡¡¡no sentía seguramente lo que yo [1vº] siento en lo hondo <strong>de</strong> mi<br />

alma...!!!<br />

Por suerte, tengo para consolarme al profundo P. Faber; él comprendía bien que las<br />

palabras y las frases <strong>de</strong> aquí abajo no son capaces <strong>de</strong> expresar los sentimientos <strong>de</strong>l<br />

corazón, y que los corazones llenos son los que se encierran más en sí mismos.<br />

Querida tía, voy a aburrirla con mis citas, tanto más cuanto que las cartas <strong>de</strong> mis cuatro<br />

hermanas 2 están ahí para <strong>de</strong>smentir mis palabras. De todas formas, querida tía, pue<strong>de</strong><br />

estar segura <strong>de</strong> que, a pesar <strong>de</strong> toda su elocuencia, ellas no la quieren más que yo,<br />

aunque yo no sepa <strong>de</strong>círselo en términos escogidos... Si ahora no me cree, un día,<br />

cuando estemos todos reunidos en el cielo, comprobará cómo la más pequeña <strong>de</strong> sus<br />

hijas no lo era en cariño y en gratitud y que sólo era la más pequeña en edad y en<br />

sabiduría.<br />

Le ruego, querida tía, que pida a Dios que yo crezca en sabiduría, como [2rº] el divino<br />

Niño Jesús. No es eso precisamente lo que hago, se lo aseguro; pregúnteselo, si no, a<br />

nuestra querida Mariíta <strong>de</strong> la Eucaristía, y ella le dirá que no miento. Cada día que pasa<br />

soy más torpe, y eso que pronto hará ya nueve años que estoy en la casa <strong>de</strong>l Señor.<br />

Debería estar, pues, ya muy avanzada en los caminos <strong>de</strong> la perfección, pero estoy<br />

todavía al pie <strong>de</strong> la escalera. Eso no me <strong>de</strong>salienta, y estoy tan alegre como la cigarra;<br />

estoy siempre cantando, igual que ella, esperando participar al final <strong>de</strong> mi vida <strong>de</strong> las<br />

riquezas <strong>de</strong> mis hermanas, que son mucho más generosas que la hormiga. Espero<br />

también, querida tía, ocupar un buen sitio en el banquete celestial, y le diré por qué:<br />

cuando los santos y los ángeles sepan que yo tengo el honor <strong>de</strong> ser su hijita, no querrán<br />

darme el disgusto <strong>de</strong> colocarme lejos <strong>de</strong> usted... Así, gracias a sus virtu<strong>de</strong>s, gozaré <strong>de</strong> los

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!