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Katherinne Brevis Arratia - Biblioteca Digital INDH

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CONCURSO. Cuenta tu Tesis en Derechos Humanos<br />

ocultas y poderosas movían los hilos del destino de Chile, cambiando totalmente lo que debería suceder, a lo que<br />

realmente acaeció (Zipper, 2006, p. 242).<br />

Se aprueba el derecho a voto a las personas mayores de 18 años, aunque fuesen analfabetos/as. Los cambios ofrecidos por<br />

el nuevo gobierno en su campaña comienzan a realizarse. Se continúa con la aplicación de la Ley de Reforma Agraria. El<br />

pánico auspiciado por la derecha es impactante, los latifundistas se sienten amenazados con las expropiaciones, y luchan por<br />

defenderse. La inversión se ha estancado, los fabricantes, empresarios, agricultores, temiendo a la expropiación, no producen<br />

más que lo necesario, lo cual hace que el rendimiento baje ostensiblemente (Zipper, 2006, p. 242).<br />

La ley de Reforma Agraria procuró conciliar la aspiración histórica de los/as trabajadores/as del agro de acceder a la tierra y<br />

a una vida digna. Entre 1964 y 1973, el estado chileno expropió casi la mitad de las tierras agrícolas del país y comenzó a<br />

distribuirla entre los campesinos. (…) En tan sólo nueve años, la Reforma Agraria desmanteló el sistema de latifundio de las<br />

grandes haciendas y el sistema laboral de semipeonaje que había dominado la agricultura chilena desde el siglo diecinueve, y<br />

cuyas raíces eran aún más antiguas. Es por esto que dicha reforma tenía un trasfondo importantísimo, recuperar o más bien<br />

alcanzar la dignidad de algunos de los más pobres y explotados del pueblo chileno. Los sueldos han subido generosamente,<br />

los precios al consumidor le son muy accesibles, pero siendo la productividad tan baja, aunque el poder adquisitivo se amplía<br />

a todos los sectores marginados del país, no hay suficiente abastecimiento (Zipper, 2006).<br />

La masiva distribución de la tierra en formas comunales de propiedad fue definida como la clave para convertir a los campesinos<br />

en trabajadores-ciudadanos. Al igual que en México, China y Cuba, la Reforma Agraria motivó el crecimiento explosivo de<br />

un movimiento rural militante que durante estos nueve años reclutó alrededor de doscientos cincuenta mil trabajadores/as,<br />

dándole al campesinado pobre una voz significativa, hasta el momento desconocida en la política nacional. Gracias a esto<br />

consiguieron masivas inversiones estatales en educación rural y salud pública, además de la iniciación de los programas de<br />

control de la natalidad.<br />

Hasta el golpe militar que derrocó al Presidente Allende en 1973, la Reforma Agraria chilena fue proporcionalmente el proceso<br />

de tierras más extenso (ver anexo 3) y menos violento que se haya llevado a cabo en ningún lugar de América Latina, ya que<br />

la misión disciplinaria y socializadora de la Reforma Agraria fue llevada adelante no sólo por las agencias gubernamentales,<br />

sino además por los sindicatos, por los partidos de oposición y por la Iglesia Católica, cada uno en grados diferentes (Tinsman,<br />

2009, p. 9).<br />

La Iglesia Católica apoyó la Reforma Agraria bajo la reflexión doctrinal: “Dios creó el universo, creó la tierra y la puso al<br />

servicio de todos los pueblos y de todos los hombres” (Episcopado de Chile, 1982, p. 415). Por tanto, la tierra no debía por<br />

qué pertenecer a un reducido grupo de hacendados, esto era visto por la Iglesia Católica como el pecado de egoísmo. El<br />

obispo de Los Ángeles, monseñor Orozimbo Fuenzalida, asume como consejero nacional del Instituto de Educación Rural<br />

(IER); al recordar sus años en el cargo relató a La Tribuna en 1971, que hace 17 años en su calidad de miembro del IER le<br />

correspondió trabajar en la provincia de Colchagua, en donde, dijo, “muchas puertas se me cerraron porque las gentes creían<br />

que éramos comunistas o marxistas y fui rechazado varias veces” (La Tribuna, 1971, 14 de abril, p. 1) , y agregó que era de<br />

interés señalar que en esa época todavía nadie hablaba de desarrollo, de superación y de progreso de los campesinos y de las<br />

poblaciones del sector rural y que la iglesia tuvo entonces una posición de avanzada a través de esta institución.

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