Katherinne Brevis Arratia - Biblioteca Digital INDH
Katherinne Brevis Arratia - Biblioteca Digital INDH
Katherinne Brevis Arratia - Biblioteca Digital INDH
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
86<br />
CONCURSO. Cuenta tu Tesis en Derechos Humanos<br />
Al preguntarle un periodista a Mons. Carlos Camus sobre el criterio de la Iglesia frente al problema de los Derechos Humanos,<br />
él responde que es el mismo de la Iglesia universal. “La Iglesia defiende al hombre y, por ejemplo, la Iglesia siempre va a<br />
ser contraria a la venganza, nunca será lícito para conseguir un fin bueno usar medios inadecuados. Muchos quisieran que<br />
la Iglesia estuviera en las nubes para que no les molestara los bolsillos, pero no les vamos a hacer el juego” (Episcopado de<br />
Chile, 1982, p. 96). Como lo relata Felipe Agüero (2005),<br />
La reflexión teológica se realizaba bajo el signo del “Dios de la Vida”, frente a las fuerzas de la muerte de esa<br />
época; asesinatos, tortura, exilio, efectos del modelo neoliberal (…) Como es sabido, la iglesia chilena, dirigida<br />
por el cardenal Raúl Silva Henríquez, constituyó un factor fundamental de contención de la represión que de otra<br />
manera habría sido bastante mayor (p. 3).<br />
Desde el mismo día del golpe militar el cardenal Raúl Silva Henríquez clamaba por respeto a las personas derrotadas<br />
anticipando lo que sería la conducta de la Iglesia en la defensa de los derechos humanos. Como lo expresaría el padre Carlos<br />
Puentes (Arzobispado de Concepción, 1988):<br />
Son muchos los hombres que han sido violados en sus derechos humanos fundamentales, en su dignidad esencial.<br />
Por esta razón la Iglesia, en cumplimiento de su misión, ha trabajado incansablemente en estos años en la defensa<br />
y promoción de los Derechos Humanos. No podría ser de otra manera (p. 10).<br />
Un prisionero político reconoce el rol que la iglesia católica jugó en defensa de los derechos humanos, pese a que la oposición<br />
también tenía un sector dentro de la iglesia.<br />
La defensa de los derechos humanos de las personas que estábamos detenidos consistía en pedir que ya se<br />
acabara la tortura, se terminara la violación, se terminara el fusilamiento, en fin, jugó un papel importante. No así<br />
las iglesias evangélicas que se mantuvieron al margen de todo. O sea, yo creo que ese fue un error de jerarquías,<br />
no se puede culpar a todos los miembros de las iglesias, porque finalmente eran ellos los que determinaban la<br />
postura de la iglesia frente al tema. Yo creo que si estas iglesias hubiesen sido capaces de unirse con la iglesia<br />
católica habría sido más fuerte la presión al gobierno que estaba para que se acabaran las violaciones a los<br />
derechos humanos (Sobarzo, 2010).<br />
Un hijo de detenido desaparecido comenta: “De la Vicaría recibimos ayuda y de una amiga de mi mamá de Holanda que<br />
nos enviaba unos dólares por medio de la Vicaría (…) La iglesia fue buena solo por un lado” (Seguel, 2010), aludiendo<br />
directamente a la Vicaría como ese único sector.<br />
Coinciden con él las demás personas entrevistadas en afirmar que fue solo un sector dentro de la iglesia católica la que se<br />
esmeró en la defensa de los derechos humanos, destacando la Vicaría de la Solidaridad. El hecho de que haya sido solo un<br />
sector y no en su totalidad, se debe a que dentro de ella no existe solamente una respuesta. En distintos sectores de la<br />
iglesia hay distintas percepciones, sensibilidades y actitudes. Se trata de maneras distintas de concebir la iglesia, su misión y<br />
su práctica (Aldunate et al., 2000, p. 32). Dentro de la iglesia conviven tres sectores claramente definidos en el libro Crónicas<br />
de una Iglesia liberadora (2000):