09.05.2013 Views

Katherinne Brevis Arratia - Biblioteca Digital INDH

Katherinne Brevis Arratia - Biblioteca Digital INDH

Katherinne Brevis Arratia - Biblioteca Digital INDH

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

78<br />

CONCURSO. Cuenta tu Tesis en Derechos Humanos<br />

su casa un grupo de carabineros y civiles (alrededor de 40), quienes lo golpean a él y a su mujer delante de sus cuatro hijos,<br />

la mayor de 5 años. Insistían con la pregunta ‘¿Dónde están las armas?’ Y las únicas armas que ellos tenían eran palas,<br />

picotas, azadones y arados. Esa vez, como no encontraron armas lo dejaron en libertad, la cual no le durará más de 4 días,<br />

cuando llega de nuevo una patrulla de militares y civiles al mando, con una lista en la mano donde aparecía su nombre. Le<br />

comunicaron que tenían la orden de fusilarlo y que se presentara al día siguiente en el retén de San Carlos Purén. Fue allí<br />

donde se encontraría con el alcalde de Santa Bárbara, René Correa, quien había sido designado por la Junta militar. Recuerda<br />

que allí le vendaron la vista y procedieron a aplicarle corriente en distintas partes del cuerpo y puñados de sal en la boca.<br />

Mientras, le preguntaban por armas y personas que él dice no haber conocido. En muy malas condiciones lo liberaron en<br />

horas de toque de queda. Pero no bastándoles con esto, el 22 de octubre de 1973 lo vuelven a detener, pero ya no esa<br />

patrulla sino los carabineros de Santa Bárbara, quienes le dicen que se despida de su familia porque no los volverá a ver y que<br />

su vida depende de René Correa. Fue trasladado en un camión hacia el fundo “Santa Ana-Huingán” de propiedad de Correa.<br />

Como este no se encontraba, lo trasladan al retén de Santa Bárbara donde el suboficial Aguilera le corrobora que tiene la<br />

orden de fusilarlo, pero que él no lo hará, por lo que decide enviarlo al regimiento de Los Ángeles. Allí lo recibe Mauricio<br />

Correa, hijo de René, enviándolo a una celda donde había 250 personas más. Al día siguiente lo trasladan a una pieza donde<br />

le vendan la vista para proceder a la sesión de tortura, con corriente en la lengua, ojos, ano y pene. En medio de ésta, pierde<br />

el conocimiento. Recién el 11 de enero de 1974 es puesto en libertad. De vuelta al asentamiento dice:<br />

(…) me encontré con que me habían quitado la casa, mi familia estaba viviendo bajo unos árboles protegidos con<br />

nylon, pero por lo menos pude seguir trabajando en el predio; pero la ´alegría` me duró hasta fines de mayo de<br />

1974. Llegaron miembros del Servicio de Inteligencia Militar y me llevaron de nuevo al regimiento y por supuesto<br />

a las sesiones de tortura, ahora porque supuestamente habían encontrado un documento que me comprometía<br />

con el MIR. Al día siguiente me llevan a la cárcel y me dejan incomunicado y diariamente recibía la visita de<br />

estos señores para ser torturado. Cerca del décimo quinto día de incomunicado y torturado, sufrí la parálisis del<br />

lado izquierdo de mi cuerpo; me trasladaron al hospital; allí estuve hasta el 24 de junio, cuando me dejaron en<br />

libertad sin cargos. Cuando llegué al asentamiento estaba despedido y mi familia ya ni siquiera podía estar bajo<br />

los árboles. Un vecino me permitió instalar mi ruca en su sitio y salí en busca de trabajo en lo que cayera (Revista<br />

COMOdato, 2003, p. 7) .<br />

Finaliza la entrevista diciendo “A pesar de todo lo que sufrí, no lograron derrotarme, seguí con mis ideales y pensando que<br />

algún día derrotaríamos a la dictadura”. Esta historia no sólo demuestra el alto costo que tuvo que pagar este hombre por<br />

su liderazgo, sino además la fuerza que tuvo para seguir adelante con miras a un mejor futuro, reafirmando su compromiso<br />

político. Don Gilberto falleció en el mes de agosto de 2010, motivo por el cual no fue posible entrevistarlo personalmente.<br />

La mayoría de los casos anteriormente expuestos se encuentran en la categoría de hechos llevados a cabo por “Abusos de<br />

poder”, así denominada por la Comisión Nacional de Reconciliación (1996, p. 20) los que correspondían a:<br />

casos de muertes provocadas por agentes de la autoridad, sin motivación política, por razones de venganza o por<br />

otros motivos particulares que no guardaban relación con las funciones del agente del Estado ni con órdenes o<br />

directivas de sus superiores.<br />

La censura, la delación, el control social, fueron entre otras las áreas en las cuales tuvieron participación numerosas personas<br />

civiles en empresas, oficinas, medios de prensa, colegios, universidades y barrios. Si bien las actividades de represión

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!