Presencia del pensamiento acalitense contemporáneo II

“Concluyamos este reverente mensaje de persuadido amor hacia lo nuestro,
para abrir nuevamente en pecho a la emoción del canto.
“Hacemos votos porque las nuevas generaciones sucedáneas, porque las
autoridades de los futuros tiempos sepan conservar con el más entrañable de
los cariños, esta preciada joya que, cual buen vino, como la historia y la
amistad, más se afinan mientras más envejecen, encorvadas de lauros, con la
pátina de las edades, pero resplandecientes y despojadas de su lecho
luminoso e ilustre de sus augustos méritos." 60 Hasta aquí las referencias de tan
celebrado inmueble.
El último número del año contiene otra nota biográfica sobre la profesora
María del Carmen Ibarra. Después de hacer una descripción de su infancia y
los principales estudios realizados, esboza su actividad profesional, indicando
que también ella se vio afectada por la reforma al artículo tercero constitucional
de 1934. En 1939 contrajo nupcias sin dejar de impartir cursos; pero a los 24
años de matrimonio falleció su consorte por lo que se dedicó de manera
íntegra a las actividades académicas. Colaboró en el colegio "Guadalupe
Victoria", en la constitución del "Margil" y en la Escuela Normal y de
Bachillerato del estado, de la que también fue directora, durante la
administración gubernamental de Olivares Santana. En ese periodo se
suprimió el ciclo de enseñanza secundaria por instrucciones de la SEP y se
restableció el bachillerato de tres grados; además, promovió la creación de la
carrera profesional de Maestra de Educación Preescolar. El escrito concluye
60 Topete del Valle, Alejandro. "Centenario de un glorioso coliseo", en Aries, México, Aguascalientes,
año IX, núm. 104, noviembre de 1985, pp. 6 y 9.
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