Abrir - El club de los que deciden vivir
Abrir - El club de los que deciden vivir
Abrir - El club de los que deciden vivir
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
verda<strong>de</strong>ro drama humano no nace (como en las telenovelas) <strong>de</strong><br />
las enfermeda<strong>de</strong>s, <strong>de</strong> <strong>los</strong> acci<strong>de</strong>ntes, <strong>de</strong> la maldad ajena ni <strong>de</strong>l<br />
amor no correspondido, sino <strong>de</strong>l hecho <strong>de</strong> <strong>que</strong> no pase nada.<br />
En la lucha contra el drama <strong>de</strong> <strong>que</strong> no pase nada, una lucha<br />
<strong>que</strong> no todo el mundo <strong>de</strong>ci<strong>de</strong> encarar, cada uno pue<strong>de</strong> darse<br />
distintas respuestas sobre qué quiere <strong>que</strong> pase para <strong>que</strong> su vida sea<br />
como quisiera.<br />
Y en medio <strong>de</strong> esas alternativas nos entrecruzamos con un<br />
villano <strong>que</strong> suele empeñarse en ingresar al drama <strong>de</strong> la existencia;<br />
un villano al <strong>que</strong>, como a todos <strong>los</strong> seres peligrosos, conviene<br />
prestarle atención: la rutina.<br />
Por<strong>que</strong>, ni bien le prestemos atención, nos daremos cuenta<br />
<strong>que</strong> ese villano finge tener un arma entre su ropa para <strong>que</strong> nos<br />
asustemos y le entreguemos todo. Nos daremos cuenta <strong>de</strong> <strong>que</strong><br />
el peligro no está en él: sino en el miedo <strong>que</strong> le tengamos.<br />
Muchas veces empeora (para ser más exactos, empeoramos)<br />
nuestra vida por el solo hecho <strong>de</strong> <strong>que</strong> imaginamos un peligro<br />
don<strong>de</strong> no lo hay.<br />
Si no nos damos cuenta <strong>de</strong> <strong>que</strong> quien quiere intimidarnos<br />
es inofensivo y el verda<strong>de</strong>ro peligro está en nuestro miedo, el<br />
resultado será el mismo <strong>que</strong> si usara un arma real: tendrá po<strong>de</strong>r<br />
sobre nuestra vida y hará lo <strong>que</strong> quiera con nosotros.<br />
Lo mismo ocurre con esa palabra <strong>que</strong> se pronuncia casi<br />
con terror: la rutina.<br />
<strong>El</strong> término rutina se refiere simplemente a la repetición <strong>de</strong><br />
sucesos.<br />
La repetición <strong>de</strong> sucesos en sí misma no nos parece un<br />
mal. No nos parece mal ver cada día a <strong>los</strong> seres <strong>que</strong> <strong>que</strong>remos;<br />
no nos parece mal <strong>que</strong> cada día salga el sol ni <strong>que</strong> dispongamos<br />
<strong>de</strong> alimentos.<br />
En síntesis, no nos molesta ni preocupa <strong>que</strong> se repitan <strong>los</strong><br />
sucesos agradables.<br />
En cuanto a <strong>los</strong> sucesos <strong>de</strong>sagradables, nos disgustan aun<strong>que</strong><br />
no se repitan.<br />
La raíz <strong>de</strong> ese casi terror parece tener relación con la repetición<br />
<strong>de</strong> acciones propias.<br />
178