Descargar - Amazonia
Descargar - Amazonia
Descargar - Amazonia
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
120 Eduardo Bedoya Garland Cocaleros: estrategias productivas y riesgo<br />
121<br />
demográficos, económicos, sociales y agronómicos que en el presente ensayo<br />
serán analizados. En este sentido, argumentamos que el análisis de la<br />
economía de los campesinos cocaleros no debe limitarse a estudiar los ingresos<br />
monetarios obtenidos a través de la comercialización de cada cultivo,<br />
sino que también debe considerar un conjunto de variables articuladas de<br />
manera compleja, que son tomadas en cuenta por el agricultor para formular<br />
las estrategias económicas y productivas de su familia agricultora.<br />
Teniendo en cuenta dichas consideraciones, podemos formular la hipótesis<br />
general de que cuando el agricultor decide cultivar tal o cual producto<br />
no se limita a considerar los precios y los correspondientes posibles ingresos<br />
monetarios, sino que considera una serie de variables que articula racionalmente<br />
con el propósito de formular una estrategia económica y productiva<br />
viable que posibilite a su respectiva familia sobrevivir a lo largo del calendario<br />
agrícola anual, cubriendo sus necesidades mínimas. Ello significa que este<br />
ensayo no se restringe a presentar información cuantitativa de los ingresos<br />
monetarios; por el contrario, estudia detenidamente el proceso de formulación<br />
de las estrategias familiares y, en algunas secciones, compara las indicadas<br />
estrategias asumidas tanto por los agricultores cocaleros como por los<br />
productores no cocaleros.<br />
Cabe indicar que el presente ensayo es resultado de una investigación<br />
realizada a finales de febrero del 2001 en el valle de los ríos Apurímac y Ene<br />
(VRAE), a solicitud de Winrock (institución encargada, en dicha fecha, de las<br />
labores de Desarrollo Alternativo en el VRAE) y del Consorcio de Investigación<br />
Económica y Social (CIES), con el auspicio de USAID 1 . En términos<br />
generales, el ámbito de estudio se encuentra localizado en la ceja de selva de<br />
la zona oriental de las provincias de Huanta y La Mar del departamento de<br />
Ayacucho, al noroeste de la provincia de La Convención del departamento de<br />
Cusco, y en la zona sur este de la provincia de Satipo del departamento de<br />
Junín. En términos político-administrativos, el valle comprende cuatro provincias<br />
y diez distritos y abarca una superficie de 12,000 kilómetros cuadrados.<br />
La población total aproximada es de 93,806 habitantes, básicamente rural. Se<br />
calcula que, al momento de realizarse la investigación, existían unas 23,000<br />
1. En este sentido, deseo agradecer a Carlos Aramburú, del CIES, y a Alejandro Rodríguez<br />
y Erick Meneses, de Winrock, por su apoyo al estudio y sus comentarios al documento. Igualmente,<br />
debo mencionar que en la tabulación de la información económica y estadística trabajó<br />
el economista Walter Ramírez. También deseo agradecer a Zulema Burneo su valioso aporte a<br />
las secciones en las que se menciona una investigación que se realizó con CARE, dirigida a<br />
entrevistar a doce familias de la región del VRAE, en setiembre y octubre del 2001. Finalmente,<br />
Laura Catalán, antropóloga, realizó un excelente trabajo de crítica y revisión del texto.<br />
hectáreas de coca, de las cuales 8,500 hectáreas estaban en plena producción,<br />
10,000 hectáreas abandonadas y 5,000 hectáreas de plantaciones de coca<br />
rodeadas de purmas o empurmadas (Ministerio de Agricultura 2000) 2 .<br />
La investigación tuvo como objetivo, en primer lugar, analizar los factores<br />
que conducen a la formulación de las estrategias productivas de los<br />
cocaleros; y en segundo lugar, estudiar los niveles de ingresos obtenidos por<br />
los indicados productores, a partir del cultivo de la coca y otros sembríos de<br />
carácter comercial. Debido a las limitaciones de tiempo y seguridad, el trabajo<br />
de investigación se basó en una encuesta —aplicada a 120 agricultores—<br />
que cuestionaba aspectos demográficos, educativos, económicos y aquéllos<br />
referidos a los sistemas de producción. Para ello se escogieron las zonas de<br />
Santa Rosa y Palmapampa, las cuales ofrecían mayor seguridad y accesibilidad<br />
3 . La encuesta recogió datos de un total de 83 agricultores cocaleros y de<br />
37 productores no cocaleros.<br />
Adicionalmente, se entrevistó a 12 agricultores distribuidos de la siguiente<br />
manera: a) cuatro agricultores (dos cocaleros y dos no cocaleros) residentes<br />
del poblado rural de San Agustín en Palmapampa; b) cuatro productores (dos<br />
2. De acuerdo con Glave y Valcárcel (1998), el total de superficie deforestada en el<br />
valle del VRAE, a principios de los noventa, era de unas 180,000 hectáreas, de las cuales<br />
80,000 estaban en producción. Más aún, durante la primera década de los noventa, las plantaciones<br />
de coca dominaban la producción del valle con alrededor de 32,000 hectáreas bajo<br />
producción. En la actualidad dicha cifra se ha reducido drásticamente, y aunque los precios<br />
de la coca han subido otra vez, la extensión de cocales no es tan amplia como lo era a mediados<br />
de los noventa. La coca comparte el espacio agrícola con plantaciones de cacao y café. Se<br />
calcula que a principios del año 2001 existían unas 93,746 hectáreas en producción. De<br />
dicho total, unas 12,280 estaban sembradas con cacao y 11,088 hectáreas con café. La yuca<br />
ocupaba una extensión de 40,548 hectáreas y el plátano un total de 10,990 hectáreas (ibídem).<br />
A las 93,746 hectáreas de cultivos legales se sumaban las plantaciones de coca. Dichas plantaciones<br />
se habían reducido a un total de 23,000 hectáreas: 8,500 hectáreas en producción,<br />
10,000 hectáreas abandonadas y 5,000 hectáreas en purma. La suma del cultivo de coca,<br />
café, cacao y plátano alcanzaba a un total de 57,358 hectáreas. Es decir, un 49% del total de<br />
la superficie cultivada a fines del año pasado. Es posible que la coca nuevamente amplíe su<br />
extensión, debido a la reciente alza en los precios. Por ello, los cultivos permanentes tienen un<br />
peso preponderante en el paisaje agrícola del valle. Asimismo, algunos de los recientes<br />
desbosques realizados por los agricultores, en zonas de bosque secundario o en purmas antiguas<br />
se deben al alza del precio de la coca. En total, sumando todos los cultivos legales con las<br />
hectáreas de coca actualmente en producción, abandonada, empurmada tenemos una extensión<br />
de 116,746 hectáreas.<br />
3. Utilizando la función aleatoria del Excel se seleccionó a 120 agricultores de un universo<br />
de nombres proporcionado por las oficinas de Winrock en San Francisco. Un total de 60<br />
encuestas fueron aplicadas en la zona de Santa Rosa, que incluye los distritos de Quimbiri y<br />
Santa Rosa. Otras 60 encuestas fueron aplicadas en la zona de Palmapampa, que incluye los<br />
distritos de San Miguel y la parte que corresponde a Santa Rosa.