La vida desnuda

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la doctrina? Algunos temas están claros, como, es un decir, la Trinidad. Discutir si hay tres divinidades o una es sin duda el campo idóneo para la aplicación de lo infalible, aunque haya sido éste, el trinitario, un problema que le ha costado muchos cismas y muchos años de debate a la Iglesia (o sea, que tampoco lo tenían claro). Pero cuando el Papa aborda un tema de política terrenal perecedera ¿está divinamente protegido del error? Cuando dice que la guerrilla salvadoreña provocó la muerte del arzobispo Óscar Romero, ¿quién se confundió, el Pontífice o el traductor de su discurso? Doscientos intelectuales cristianos italianos criticaron la actitud del Papa en Nicaragua. ¿Pudo equivocarse Juan Pablo II en el enjuiciamiento que ha hecho con sus gestos, con sus actitudes, de la situación política concreta, o la infalibilidad se manifiesta siempre que el Pontífice lo quiere y necesita, sea o no un tema doctrinario? ¿Es infalible la infalibilidad? Fue en el Concilio Vaticano I, en 1870, cuando se estableció el dogma de la infalibilidad. Los papas anteriores ¿se
equivocaban, eran un poco más humanos? Pregunto y pregunto y seguramente abundo en el error y en el pecado: es natural, yo no dispongo de un dogma que me ampare. (20-3-83)
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Truculencias Voy a contar una histo
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Oposiciones El mes pasado se celebr
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San Teleco Lo escuché casualmente
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Fiesta Me lo acaban de contar Patri
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Gitanos Afortunadamente, y como de
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Pero no es eso sólo. Porque, junto
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de las omnicomprensivas chicas de b
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Éxito Hay que ver lo bien que nos
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Corrupción La corrupción se ha pu
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Violencia El otro día pasé por de
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además es una violencia estupendam
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Selenita Estaba yo instruyéndome c
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Violaciones Lo peor de vivir en un
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Para ellos Alguna vez he escrito so
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Rodoreda en Espejo roto. Es una nov
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La viuda errante Las gentes que mal
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avarienta y estúpida. Es el caso d
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uenos. Además del dinero de la her
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pequeñas venganzas hogareñas. No
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El gran amor Leo un artículo sobre
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serrado en dos a su ayudante. Pero
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una dulce sobremesa con algún amig
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Ellos Recibo una carta sobria y emo
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Negritud Dos presos que llevaban di
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sabía nadar (asombrosa osadía la
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