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ACTA DEL 63. er CONGRESO DE LA FIFA, MAURICIO 2013 129
que se invitará igualmente al Congreso a votar sobre
los límites de edad y de mandato, recogidos en el
punto 13.1.3 del orden del día. Para acabar, informa
de que, tal y como se solicitó en el Congreso de 2012,
el International Football Association Board (IFAB),
como custodio de las Reglas de Juego desde 1886, ha
comenzado con su propio proceso de reformas para
convertirse en un órgano más moderno, democrático
y transparente, algo que conseguirá tras consultar a
un panel de expertos técnicos del mundo del fútbol,
para acabar transformándose en una entidad con
autonomía legal.
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Mark Pieth, presidente de la Comisión Independiente de
Gobernabilidad (CIG), agradece a la FIFA la oportunidad
que le brinda de presentar las valoraciones de la CIG
sobre el proceso de reformas en curso y reconoce la
ingente labor de sus colegas de los grupos de trabajo
y la CIG. Apunta que los críticos con el proceso han de
entender que se trata de una reforma de autorregulación
que no se lleva a cabo desde fuera. La FIFA es una
institución un tanto complicada, y la compara con un
petrolero que intenta cambiar el curso.
En cuanto a los logros alcanzados durante el proceso,
comenta que la FIFA ha sido capaz de dotarse con una
Comisión de Ética independiente y creíble y con un
nuevo Código Ético. El hecho de que sus decisiones
no contenten a todo el mundo es consecuencia de su
independencia, pero siguen empeñados en continuar
con esta línea de trabajo con el único objetivo de
crear unos estándares de integridad para todas las
operaciones de la FIFA, y también de reforzarlos.
Considera crucial que la FIFA haya avanzado de forma
espectacular en aquellas áreas en las que se asemeja
a una multinacional, concretamente al contar con un
presidente independiente en su Comisión de Auditoría
y Conformidad y, con él, con una vicepresidenta
igualmente independiente (si se aprueba a la candidata
propuesta).
Pero aún quedan muchos retos por afrontar; la lógica
del proceso de reformas no era únicamente crear una
estructura que pudiera asumir los hechos del pasado,
sino también introducir los exámenes de integridad
equiparables a los estándares actuales de diligencia
debida. La CIG ha sugerido de forma ininterrumpida
que los miembros del Comité Ejecutivo deberían
ser independientes, al objeto de disipar cualquier
duda sobre posibles procedimientos turbios. A este
respecto, aplauden el hecho de que la FIFA haya
puesto especial énfasis en la integridad en cuanto a
la elección y reelección de los miembros a través del
Comité Ejecutivo; también conforta escuchar que, como
medida transitoria, el presidente de la Comisión de
Auditoría y Conformidad puede estar presente en las
sesiones de las comisiones que él elija.
Compara la FIFA, como órgano rector del fútbol,
con una organización intergubernamental, donde la
democracia y la transparencia son requisitos claves; uno
de los mayores retos pendientes para la FIFA es pues
la transparencia en la remuneración de sus directivos
de mayor rango. Invita al Presidente de la FIFA y al
Comité Ejecutivo a ser valientes y a tomar las medidas
necesarias para que las asociaciones miembro, los
aficionados y el público en general entiendan que no
tienen nada que ocultar. Considera desacertado que
el Congreso pueda no tener la posibilidad de decidir
sobre los límites de edad y mandato, ya que existe el
riesgo de que no decidir sobre estos aspectos se pueda
entender en el exterior como algo simbólico.
Mark Pieth concluye su intervención apuntando que,
en general, se ha avanzado de forma notable y que,
incluso con las enmiendas a los Estatutos y otros textos,
el proceso de reformas dependerá de la implantación
y aplicación en el futuro de nuevos estándares.