2º AÑO DE CONFIRMACIÓN - Catequesis Familiar Salta
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social, laboral y a ser testigos de Cristo en todas las realidades que les toca<br />
vivir.<br />
Los laicos ejercen su apostolado, especialmente, por medio del ejemplo en la<br />
vida cotidiana. Deben llevar a Cristo a aquellos lugares a donde ni el Papa, ni<br />
los obispos, ni los sacerdotes llegan: el lugar de trabajo, el estudio, los<br />
amigos, la familia, el deporte la diversión, el noviazgo, etc. Como dice la<br />
Madre Teresa de Calcuta: “Recuerden, ustedes son el único evangelio que<br />
muchas personas leerán en sus vidas”.<br />
Los consagrados: son los hombres y mujeres que consagran su vida a Dios<br />
en exclusividad. Dejando sus familias y sus bienes, viven en la Iglesia<br />
sirviendo a Cristo y a los hermanos mediante los votos de pobreza, obediencia<br />
y castidad. Los ermitaños, que se retiran del mundo para dedicarse a la<br />
oración en vida solitaria y en soledad; los contemplativos, que se dedican a la<br />
oración en comunidad y soledad; las vírgenes consagradas; las religiosas o<br />
religiosos que viven en comunidades sus carismas; los hermanos de institutos<br />
seculares; todos ellos dan testimonio con sus vidas de que es posible vivir las<br />
enseñanzas de Jesús y transformar el mundo.<br />
EL CUERPO MÍSTICO <strong>DE</strong> CRISTO<br />
El pueblo de Dios no es solamente un cuerpo de sacerdotes y reyes, es<br />
también una comunidad social, el Cuerpo Místico de Cristo, el cual posee dos<br />
propiedades esenciales a toda sociedad.<br />
1. multiplicidad de miembros y funciones correspondientes a cada uno, y<br />
2. unidad en su movimiento. Todos los miembros forman en la Iglesia “Un<br />
cuerpo coordinado y unido” (Ef. 4, 16) en el que todos tienen una parte y<br />
una función que está en perfecta armonía con la unidad de todo el cuerpo.<br />
No tienen una vida propia, sino que un único principio encauza sus<br />
actividades al bien común de todo el cuerpo (1Cor. 12, 12ss).<br />
Este cuerpo dotado de múltiples miembros y unidad de vida, no es un<br />
compuesto social cualquiera sino el Cuerpo de Cristo. “Vosotros sois el cuerpo de<br />
Cristo y miembros cada uno por su parte” (1Cor. 12,27). Cristo y la Iglesia son<br />
inseparables y se completan mutuamente.<br />
San Pablo concibe la Iglesia no como un cuerpo físico en el que las partes no<br />
conservan su individualidad, ni como un cuerpo moral en el que los miembros se<br />
unen entre sí por un vínculo puramente externo, sino como un cuerpo místico en el<br />
que las partes, conservando su individualidad, se unen por un principio intrínseco<br />
sobrenatural común a todas. El Espíritu Santo (1Cor. 12, 4 – 11).<br />
Cristo es la cabeza del cuerpo porque asume en la Iglesia la misma función<br />
que la cabeza en el cuerpo físico: es decir, gobierna e infunde vida (Ef. 1, 22 – 23).<br />
Cristo es cabeza de la Iglesia y esta su complemento que se puede entender en<br />
dos sentidos: o la Iglesia perfecciona a Cristo porque proporciona los miembros<br />
cuya cabeza es El, y sin la cual no podrían subsistir; o Cristo perfecciona la Iglesia<br />
porque siendo su cabeza le confiere la vida. En los dos casos Cristo y la Iglesia son<br />
inseparables como la cabeza y el cuerpo. Como en la alegoría de la vid y los<br />
sarmientos (Jn. 15, 1- 5), Cristo, cabeza de la Iglesia, es el principio del que deriva<br />
la vida que circula por los miembros y los hace crecer y secunda en sus funciones.<br />
Si Cristo es la cabeza del cuerpo místico porque lo gobierna y le da Vida. El<br />
Espíritu Santo es el alma que vivifica el cuerpo.<br />
El alma aún siendo independiente del cuerpo, existe en él y lo informa como<br />
principio vital que le confiere unidad y actividad.<br />
Es la función que realiza en la Iglesia el Espíritu Santo. Existe<br />
independientemente de la Iglesia porque es una persona de la Santísima Trinidad<br />
que se distingue del Padre y del Hijo y de cualquier otra realidad. Sin embargo, así<br />
como el alma, aunque sea independiente del cuerpo, existe en el informándolo, así<br />
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