Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
en la mano im cayado. No supo su identidad. Un brehón,<br />
un poeta, im druida. El anciano señaló un libro con páginas<br />
en blanco. Agitado, bostezó y se levantó para meditar.<br />
En la azotea se escuchó nuevamente el sonido<br />
persistente de las polcas de los Tigres del Norte.<br />
En la tarde, luego de tomarse dos copas de mezcal,<br />
volvió a prender la radio. Una voz anónima, paternal,<br />
apacible, hablaba del mercado, del consumo y de la productividad.<br />
Maldijo en silencio y apagó el aparato. Pensó<br />
en su sueño, particularmente en el anciano y su<br />
ademán premonitorio. Las páginas en blanco bien pudieran<br />
ser los actos fútiles de vma estirpe empeñada en destruir<br />
cada hecho glorioso de su pasado. De esta manera,<br />
los cincuenta azotes que recibieran los nueve miembros<br />
indultados del Batallón de San Patricio, la marca en el<br />
rostro con hierro candente con la letra "D", la imposición<br />
de vm collar de tres picos, los grilletes en los pies, las vejaciones,<br />
la prisión, los trabajos forzados en que se manifestó<br />
"la clemencia" del general Winfield Scott luego de<br />
haber condenado a la horca al grueso de la Compañía<br />
de los irlandeses, bien pudiera imirse a los actos desesperados<br />
con que algunos trataron de evitar el desastre final,<br />
como la defensa del alcázar del castillo de Chapultepec<br />
hecha por los cadetes del Colegio Militar, en que destacó<br />
el joven cadete Miguel Miramón.<br />
Reflexionó en el inútil sacrificio del Batallón de San Patricio,<br />
en su deliberada voluntad de destrucción, en su<br />
adhesión incondicional a una causa perdida, en el martirio<br />
estéril por el que creyeron que "aquí escribiremos con<br />
sangre nuestros nombres, aquí ondeará nuestra bande<br />
ra y el nombre de San Patricio será venerado". Cuando<br />
todo ocurrió al revés de sus piadosas previsiones.<br />
Volvió a tomar el manuscrito, recordó al anciano de su<br />
sueño; la cruz céltica grabada en tinta negra refulgió en<br />
púrpura como si hirviera en ella la sangre que fue derramada.<br />
Desconcertado, limpió sus gafas con vm pañuelo<br />
blanco. La cruz céltica brilló con un rojo intenso. Con dedos<br />
temblorosos la tocó y en ese momento irradiaron<br />
102