0. introductorias agrad. y estruc - Acceda - Universidad de Las ...
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INTRODUCCIÓN<br />
La especie Caretta caretta, objeto <strong>de</strong> este estudio, se caracteriza por la disposición, en la parte dorsal<br />
<strong>de</strong>l caparazón, <strong>de</strong> 1 escudo nucal consi<strong>de</strong>rablemente amplio, 5 escudos dorsales, 5 pares <strong>de</strong> escudos<br />
costales (el primero en contacto con el escudo nucal), y generalmente 12 pares <strong>de</strong> escudos<br />
marginales. En lo referente a los escudos <strong>de</strong>l plastrón, consta <strong>de</strong> 3 pares <strong>de</strong> inframarginales, que no<br />
presentan poros y pue<strong>de</strong>n presentar 1 escudo intergular y 1 anal <strong>de</strong> pequeño tamaño o carecer <strong>de</strong> los<br />
mismos.<br />
Consecuentemente y en respuesta a la selección natural <strong>de</strong>l medio acuático, <strong>de</strong>sarrollaron<br />
adaptaciones fisiológicas, anatómicas y <strong>de</strong> comportamiento, <strong>de</strong> manera que en relación a la utilización<br />
<strong>de</strong>l hábitat y <strong>de</strong> sus migraciones, poseen muchos elementos en común con gran<strong>de</strong>s peces y cetáceos<br />
(Musick y Limpus, 1997). Algunas <strong>de</strong> estas adaptaciones fueron, por ejemplo, la reducción y<br />
aplanamiento <strong>de</strong>l caparazón para <strong>de</strong>sarrollar una forma mas hidrodinámica, facilitando la natación y la<br />
velocidad <strong>de</strong> movimientos en el agua; la perdida <strong>de</strong> la capacidad <strong>de</strong> retraer la cabeza y extremida<strong>de</strong>s<br />
en el interior <strong>de</strong>l caparazón, por lo que han evolucionado protegiendo la cabeza con escamas córneas<br />
sobre el cráneo <strong>de</strong>l animal (Márquez, 1996). Estas escamas también varían en número <strong>de</strong>pendiendo<br />
<strong>de</strong> la especie y sirven <strong>de</strong> ayuda a la hora <strong>de</strong> la i<strong>de</strong>ntificación taxonómica <strong>de</strong> las distintas especies,<br />
(principalmente las escamas prefrontales: 1 par la tortuga ver<strong>de</strong>, 2 pares la tortuga carey, mas <strong>de</strong> 1<br />
par la olivacea y golfina, y ninguna la tortuga laúd). La tortuga común o boba se caracteriza, a<strong>de</strong>más,<br />
por presentar una cabeza consi<strong>de</strong>rablemente ancha, en la cual se observan 2 pares <strong>de</strong> escamas<br />
prefrontales, 3 escamas supraoculares y <strong>de</strong> 3 a 4 escamas postorbitales.<br />
Otro adaptación al medio marino es que sus patas se han transformado en aletas o remos, con los<br />
<strong>de</strong>dos muy largos y unidos, y solamente con una o dos uñas reducidas. <strong>Las</strong> <strong>de</strong>lanteras adquieren una<br />
forma alargada especializada en la propulsión y las traseras una forma redon<strong>de</strong>ada para dirigir sus<br />
movimiento a modo <strong>de</strong> timón. <strong>Las</strong> aletas también están cubiertas por escamas pero mucho menos<br />
calcificadas y por lo tanto, mas finas.<br />
El hecho <strong>de</strong> poseer una protección efectiva <strong>de</strong> los órganos vitales y al mismo tiempo llevar a cuestas<br />
un peso excesivo ha conferido a las tortugas una actitud <strong>de</strong>fensiva, no <strong>de</strong> ataque, que les ha<br />
proporcionado más ventajas que problemas ya que ha sido un "pasaje seguro" a través <strong>de</strong> las eras<br />
geológicas y les ha permitido sobrevivir a sus compañeros en el tiempo y llegar a nuestros días, por lo<br />
que no hay duda <strong>de</strong> su éxito evolutivo (Márquez, 1996).<br />
El tamaño <strong>de</strong> las tortugas marinas varia <strong>de</strong> unas especies a otras, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> los 55cm <strong>de</strong> longitud <strong>de</strong><br />
caparazón y 36kg <strong>de</strong> peso <strong>de</strong> la tortuga olivácea, a los casi 200cm y 600kg <strong>de</strong> la tortuga laúd. El peso<br />
medio <strong>de</strong> las tortugas adultas <strong>de</strong>l resto <strong>de</strong> las especies varia entre los 50 y 200Kg (la tortuga marina<br />
más pesada conocida fue una laúd <strong>de</strong> 907kg) y su longitud <strong>de</strong> caparazón ( ∗ SCLmin) entre 75 y 125cm<br />
(Spotila, 2004).<br />
Según Kamezaki (2003), en la recopilación realizada por Bolten y Witherington (2003) sobre la tortuga<br />
Caretta caretta, el tamaño medio <strong>de</strong> la tortuga boba <strong>de</strong>l Atlántico (unificando datos <strong>de</strong> las distintas<br />
poblaciones), es <strong>de</strong> 82.9cm (SD = 5.5cm) en * SCLmin con un rango <strong>de</strong> 71.9 - 96cm.<br />
∗ Una <strong>de</strong> las medidas estandarizadas a nivel mundial para tortugas marinas y que se <strong>de</strong>scribe en el apartado <strong>de</strong><br />
metodología.<br />
A) B)<br />
Fig. 20 : Folidosis <strong>de</strong> la<br />
tortuga boba (Caretta<br />
caretta). A) Caparazón<br />
y cabeza; B) Plastrón.<br />
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