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Historia del Cristianismo II - iglesia evangélica el olivo

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complicadísimo calidoscopio r<strong>el</strong>igioso de los Estados Unidos.<br />

Una consecuencia notable de las muchas olas de inmigración fue la fundación de<br />

comunidades r<strong>el</strong>igiosas. Desde los inicios de la colonización británica en<br />

Norteamérica, uno de los impulsos que habían traído a los europeos a estas playas<br />

era la posibilidad de crear una nueva sociedad en una nueva tierra.<br />

Tras los peregrinos <strong>d<strong>el</strong></strong> Mayflower vinieron millares de personas con sueños<br />

parecidos, aunque diferentes. Los moravos fundaron sus comunidades en Pennsylvania,<br />

y lo mismo hicieron los menonitas y otros anabaptistas, buscando un lugar<br />

donde les fuera posible practicar su pacifismo y apartarse de la corrupción <strong>d<strong>el</strong></strong> resto<br />

de la sociedad Los pietistas alemanes fundaron en <strong>el</strong> mismo estado la comunidad de<br />

Efrata, y varias otras tanto en Pennsylvania como en Ohio. En algunos casos, estos<br />

experimentos comunitarios se iban a los extremos, como en la comunidad de<br />

Oneida, donde llegó a practicarse no solo la comunidad de bienes, sino lo que<br />

llamaba <strong>el</strong> "matrimonio complejo", en <strong>el</strong> que todos los adultos decían estar casados<br />

entre sí.<br />

Probablemente <strong>el</strong> más notable de estos experimentos fue <strong>el</strong> de los Shakers o<br />

"tembladores", bajo la dirección de la profetisa Ann Lee Stanley, conocida dentro <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

movimiento como la Madre Ann Lee. En sus inicios, los Shakers intentaron vivir<br />

según sus aspiraciones en su Inglaterra natal. Pero a la postre las presiones<br />

sociales fueron tales que decidieron emigrar a Norteamérica. En los nuevos<br />

territorios, inspirados quizá por los muchos otros ejemplos en su derredor, decidieron<br />

llevar una vida comunitaria. Las doctrinas de los Shakers, y sus prácticas, eran<br />

únicas. La Madre Ann Lee decía ser la Segunda Venida de Cristo, quien había<br />

regresado ahora en forma femenina, como antes había venido en forma masculina.<br />

A la postre todos se salvarían, y por tanto la función de la comunidad de creyentes<br />

era ser la vanguardia de la salvación final. En <strong>el</strong> entretanto, era necesario<br />

abstenerse <strong>d<strong>el</strong></strong> sexo, que era la raíz de todo mal. En <strong>el</strong> culto, una de las<br />

características de los Shakers era <strong>el</strong> baile con que adoraban a Dios. Durante unas<br />

pocas décadas, <strong>el</strong> movimiento floreció, y se fundaron varias comunidades. Como<br />

experimentos de vida comunitaria, fueron un verdadero éxito, pues las condiciones<br />

de vida eran mejores que las de la sociedad circundante. Empero a la postre, por<br />

falta de conversos y de nuevas generaciones, desaparecieron.<br />

EL SEGUNDO GRAN AVIVAMIENTO<br />

A fines <strong>d<strong>el</strong></strong> siglo XV<strong>II</strong>I, comenzó en Nueva Inglaterra un Segundo Gran Avivamiento<br />

semejante al primero, <strong>d<strong>el</strong></strong> que tratamos en las últimas páginas de la sección anterior.<br />

Contrariamente a lo que podría pensarse, este avivamiento no se caracterizó por<br />

grandes explosiones emotivas, sino que lo que sucedía era más bien que, de modo<br />

inusitado, las gentes empezaban a tomar su fe con mayor seriedad, y reformaban<br />

sus costumbres para ajustarse mejor a las exigencias de esa fe. La asistencia a los<br />

cultos aumentó notablemente, y eran numerosas las personas que contaban<br />

experiencias de conversión. Tampoco tuvo este avivamiento al principio los matices<br />

antiint<strong>el</strong>ectuales que han caracterizado otros avivamientos. Al contrario, se abrió<br />

paso entre muchos de los más distinguidos teólogos de Nueva Inglaterra, y pronto<br />

uno de sus principales predicadores fue <strong>el</strong> presidente de la Universidad de Yale,<br />

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