Corcho Loco y Otros Relatos - GuajaRs

La masa de piezas se mueve lentamente, como si la criatura respirara. Una
estructura emerge de su costado izquierdo adoptando la forma de un brazo
emplumado. Luego se forma otro, las piernas y el torso. Lo último es el rostro
fascinante por sus rasgos humanos, aunque sus ojos son rubíes inexpresivos
encendidos y brillantes.
La Doctora Pepper retrocede, extasiada. El ser, reluciente, alto, mecánico y
orgánico a la vez, con detalles transparentes que permiten vislumbrar su interior... la
observa con esa sonrisa extraña. Quizá no se trate de una mueca, sino de la expresión
natural de su rostro alienígena. Pero nada de esto importa. Está ante él/ella, una
criatura que cayó a la Tierra y en estado de metamorfosis. Era la primera persona en
establecer contacto con otra raza inteligente, tal vez un representante de los ángeles y
de Dios mismo. Los putos cabrones del hemisferio norte se convertirán en estatuas de
sal al descubrir que una nación del sur se lleva todo el crédito. ¡Dios! Espero que no se
les ocurra atacarnos ahora para tapar el asunto, no sería la primera vez...
Como si leyera la mente de su única espectadora en el laboratorio, Néxor
extiende un brazo con tal rapidez que la Doctora no comprende lo que ocurre sino un
segundo después, su cabeza es separada del cuerpo y observa atónita cómo sus restos
caen al piso mientras es sostenida por la mano-garra de la criatura.
Órganos tentaculares emergen desde la entrepierna del ser y exploran el
cadáver. Filtran la sangre y licuan los órganos usando ácidos orgánicos, recuperando
algunos químicos necesarios e incinerando lo demás con un golpe de energía mal
calculado.
El edificio de trece pisos se parte en el nivel siete por causa de la explosión
resultante. El segmento superior se eleva algunos metros, cayendo de regreso sobre el
resto de la estructura. El concreto se pulveriza y en su lugar sólo queda una montaña
de escombros rodeada por una nube de polvo.
De entre los escombros emerge una masa de piezas metálicas que rápidamente
adopta la forma de un vehículo cubierto de espinas y con cuatro ruedas suspendidas
por largos ejes. La máquina avanza sin emitir sonido, atacando otros vehículos y
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