Corcho Loco y Otros Relatos - GuajaRs
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de pluma. Abren las mirillas a los costados del vehículo y ven a los hombres<br />
gesticulando sin decir palabra.<br />
Una rueda se ha atascado en una grieta formada por dos rocas enterradas.<br />
Usando los mangos de sus lanzas, cinco hombres hacen palanca sin proferir<br />
ninguna exclamación de agotamiento mientras el restante tira de las riendas.<br />
Desde el carruaje la madre de la bebé observa el trabajo de los hombres, porque<br />
uno de ellos es su esposo. Éste, al notar su mirada de ojos grandes y preocupados, se<br />
descubre el rostro sudado y manchado dedicándole una cálida sonrisa.<br />
Logran liberar la rueda de la trampa en pocos minutos. Luego reparan parte del<br />
acolchado que oficia de llanta y aprovechan de revisar el resto de la caravana y<br />
engrasar los ejes.<br />
∞<br />
La primera noche luego de un día de viaje ininterrumpido, nadie durmió. Todos los<br />
vehículos fueron cubiertos con ramas mientras los hombres aguardaban ocultos debajo. El<br />
silencio era absoluto y a ratos el viento les traía los gritos de guerra de los que se quedaron<br />
en el fuerte a defender lo que ya estaba perdido, otorgándoles tiempo valioso.<br />
Eran sus padres, madres y abuelos, fieros combatientes que lograron<br />
permanecer con vida a la llegada de la peste ambulante, asegurando el alimento<br />
durante las horas de luz, creando la economía de subsistencia con la que pudieron<br />
sobrevivir durante todas sus vidas.<br />
Pero con el paso de los años su número había disminuido y Eso lo sabía. Ya no<br />
podían defenderse como antes.<br />
La segunda noche estaban bastante lejos como para no oír nada excepto el<br />
viento y el baile de los árboles, pero el horror se encontraba muy cerca. Sintieron los<br />
gritos de hombres y mujeres torturados. Eran la carnada, sus parientes cercanos, una<br />
trampa que nadie tomaría en cuenta a pesar del hierro candente en sus corazones.<br />
A lo lejos podía verse la luz de un gran incendio iluminando los cerros.<br />
∞<br />
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