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HABLA EL ANTIGUO TESTAMENTO - OpenDrive

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La dinastía cayó en declive bajo los reyes siguientes: Darío II (423-404 a. C.) y Artajerjes<br />

II (404-359). Artajerjes III (359-338) dio lugar a un resurgir de la unidad y la fuerza del imperio,<br />

pero el fin estaba próximo a llegar. Durante el gobierno de Darío III, Alejandro Magno, con<br />

tácticas militares superiores, deshizo el poderío del ejército persa (331) e incorporó el Cercano<br />

Oriente a su reino.<br />

Condiciones del exilio y esperanzas proféticas<br />

Los últimos dos siglos de los tiempos del Antiguo Testamento, representan una era de<br />

condiciones de exilio para la mayor parte de Israel. Durante la conquista por Nabucodonosor<br />

muchos israelitas cautivos fueron llevados a Babilonia. Tras la destrucción de Jerusalén, otros<br />

judíos emigraron a Egipto. Aunque algunos de los exiliados volvieron de Babilonia tras el año<br />

539 a. C., para reestablecer un estado judío, en Jerusalén, nunca volvieron a ganar la posición de<br />

independencia y de reconocimiento internacional que Israel tuvo una vez bajo el gobierno de<br />

David.<br />

La transición desde un estado nacional al exilio de Babilonia, fue gradual para el pueblo<br />

de Judá. Por lo menos, cuatro veces durante los días de Nabucodonosor hubo cautivos de<br />

Jerusalén que fueron llevados a Babilonia.<br />

De acuerdo con Beroso, el rey babilonio Nabopolasar envió a su hijo Nabucodonosor, en<br />

el 605 a. C., para suprimir la rebelión en el oeste. 336 Durante esta campaña, el último recibió<br />

noticias de la muerte de su padre. Dejando a los cautivos de Judá, Fenicia y Siria con su ejército,<br />

Nabucodonosor se dio prisa en volver para establecerse en el trono de Babilonia. La evidencia<br />

bíblica (Dan. 1:1) fecha lo sucedido en, el tercer año de Joacim, que continuó como gobernante<br />

en Jerusalén por ocho años más tras la crisis. 337 La extensión de su cautiverio no está indicada,<br />

pero Daniel y sus amigos están entre la familia real y la nobleza, tomada en cautividad y llevada<br />

al exilio en aquel tiempo. De aquellos cautivos israelitas, jóvenes procedentes de Israel fueron<br />

llevados a la corte para ser entrenados en el servicio del rey. Algunas de las experiencias de<br />

Daniel y sus colegas en la corte de Babilonia, son bien conocidas en los relatos del libro de<br />

Daniel 1-5.<br />

La segunda invasión babilonia de Judá ocurrió en el 597 a. C. Esta fue más crucial para el<br />

Reino del Sur. Al retener el tributo de Babilonia, Joacim invocó un estado de calamidad. Puesto<br />

que Nabucodonosor estaba ocupado en otros lugares, incitó a los estados circundantes a atacar a<br />

Jerusalén. Aparentemente Joacim fue muerto durante uno de esos ataques, dejando el trono de<br />

David al joven de dieciocho años, hijo suyo, Joaquín. El reinado de este último de tres meses fue<br />

bruscamente terminado cuando se rindió a los ejércitos de Babilonia (II Reyes 24:10-17).<br />

Fuentes babilónicas confirman que esta invasión tuvo lugar en el mes de marzo del 597 a. C. 338<br />

Las cartas de Laquis igualmente indican una invasión judea por aquel tiempo. 339 No solo el rey<br />

fue tomado cautivo, sino que con él fueron miles de personas importantes de Jerusalén, tales<br />

como artesanos, herreros, oficiales jefes, príncipes y hombres de guerra. Sedequías, un tío de<br />

Joaquín, fue dejado para gobernar las clases más pobres de lo que quedaba en el país.<br />

336 Josefo, Agaítat Apion, i. 132-139; Antiquities, x. 219-223. Más recientemente confirmado.<br />

337 Los eruditos que datan el libro de Daniel en el siglo II a. C., no consideran a Da-« como personaje<br />

histórico ni aceptan esta referencia como históricamente fiable. Ver Auderson, Understanding the Oíd<br />

Testament, pp. 515-530. También Interpretéis Bible, VI, «Daniel», pp. 355 y ss.<br />

338 Wiseman, op. cít., p. 33.<br />

339 Ver C. F. Whitley, The Exile Age (Londres: Westminster Press, 1957), p. 61.<br />

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