HABLA EL ANTIGUO TESTAMENTO - OpenDrive
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En el año segundo de Darío (520 a. C.) los judíos acabaron el trabajo en el templo.<br />
Hageo, con el mensaje de Dios para la ocasión, conmovió a la gente y a los jefes recordándoles<br />
que habían estado tan absortos en reconstruir sus propias casas que habían descuidado el lugar<br />
del culto. 368 En menos de un mes, Zorobabel y Josué llevaron al pueblo en un renovado esfuerzo<br />
para reconstruir el templo (Hageo 1:1-15). Poco después, el profeta Zacarías colaboró con<br />
Hageo en estimular el programa de construcción (Zac. 1:1).<br />
La reanudación de las actividades constructoras en Jerusalén captó inmediatamente la<br />
atención de Tatnai, el sátrapa de Siria, y de sus colegas, quienes representaban los intereses de<br />
Persia en aquella zona. Aunque habían ido a Jerusalén para hacer una completa investigación,<br />
propusieron la acción, mientras aguardaron el veredicto de Darío. En una carta dirigida al rey<br />
persa, informaron de sus hallazgos concernientes al pasado y a los acontecimientos del presente,<br />
respecto a la erección del templo. Se ocuparon primeramente de la afirmación judía de que Ciro<br />
había garantizado el permiso para construir el templo.<br />
Siguiendo esta advertencia, Darío ordenó una investigación en los archivos de Babilonia<br />
en Ecbatana, capital de la Media. En esta última, se encontró un dikrona, anotándose en arameo<br />
el edicto de Ciro. Además de verificar este decreto, Darío emitió órdenes estrictas para que<br />
Tatnai y sus asociados se abstuvieran de interferir de ningún modo. También ordenó que el<br />
tributo real de la provincia de Siria fuese entregado a los judíos para su programa de<br />
construcciones. También dio instrucciones para proporcionar un adecuado suministro que<br />
permitiesen sacrificios diarios de tal forma que los sacerdotes en Jerusalén pudiesen interceder<br />
por el bienestar del rey de Persia. Consecuentemente, la investigación de Tatnai que tenía<br />
intenciones injuriosas, providencialmente resultó no sólo en favor del apoyo político de Darío,<br />
sino también en la ayuda material de los distritos inmediatos oficiales, para el proyecto.<br />
El templo fue completado en cinco años, 520-515 a. C. Aunque erigido en el mismo<br />
lugar, no podía tener la misma belleza ni el precioso acabado artesano que la estructura<br />
construida por David y Salomón, con la elaborada preparación que hizo el primero con sus<br />
infinitos recursos, Basándose en Macb. 1:21, y 4:49-51, se hace aparente que el resultado fue<br />
inferior. En el sagrado lugar del altar de los inciensos, se hallaban los sagrados ornamentos y el<br />
candelabro de los siete brazos (Salomón en, su época había provisto generalmente al altar con<br />
diez candelabros). El arca del pacto se había perdido en el lugar más sagrado del templo. Josefo<br />
indica que cada ano, en el Día de la Expiación, el sumo sacerdote colocaba su incensario en la<br />
losa de piedra que marcaba la antigua posición del Arca. 369<br />
Parrot, en sus estudios sobre el templo, concluye que los planes de Salomón y del<br />
santuario, fueron seguidos probablemente por Zorobabel. 370 Referencias sueltas en Esdras y en<br />
los libros de los Macabeos, pueden servir solo como sugerencias. De acuerdo con Esdras 5:8, y<br />
6:3-4, se emplearon grandes piedras con vigas de madera en la construcción de los muros. Las<br />
medidas dadas son incompletas en el presente texto. Una reciente interpretación de un decreto de<br />
Antíoco III de Siria (223-187) indica la existencia de un atrio interior y otro exterior. 371 Todos<br />
368 Albright considera a Haggeo y a Zacarías como oportunistas que tomaron ventaja de la rebelión por<br />
todo el Imperio Persa que siguió a la accesión de Darío Histapes en el 522. Dos meses antes al mensaje<br />
inicial de Hageo, un hombre llamado Nabucodonosor condujo a una rebelión en Babilonia, que todavía<br />
aparece como teniendo éxito cuando Hageo entregó su cuarto mensaje dos meses más tarde. The<br />
Bíblical Períod (Pittsburgh, 1950), pp. 49-50.<br />
369 Jewísh Wars, v. 5, 5.<br />
370 André Parrot, The Temple of Jerusalén, traducido Por E. Hooke, del francés. pp. 68-75<br />
371 Ver Ibid., p. 73, donde se refiere al estudio hecho por E. Bickerman «Une proclamation seleucide<br />
relative au Temple de Jerusalem», en Syria XXV (1946-48), 67-85.<br />
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