77OIT / América <strong>Latina</strong> y <strong>el</strong> <strong>Caribe</strong>Contexto político-institucionalPaís Año Instancia(s) AcuerdoMéxico 2004Consejo para <strong>el</strong> Diálogo con los Sectores Productivosde MéxicoCompromiso por la Competitividad, para <strong>el</strong> Empleo yla Justicia Social.Nicaragua 2008Ministerio de Trabajo, Comité de Enlace Sindical yConsejo Superior de la Empresa Privada (COSEP)Acuerdo Tripartito de Adopción d<strong>el</strong> Programa Nacionalde Trabajo Dec<strong>en</strong>te de Nicaragua.Panamá 2007Ministerio de Trabajo, Consejo Nacional EmpresaPrivada, Consejo Nacional Trabajadores OrganizadosAcuerdo Tripartito de Adopción d<strong>el</strong> Programa Nacionalde Trabajo Dec<strong>en</strong>te de Panamá.Perú 2007Comisión Nacional intersectorial para erradicar trabajoforzoso, Consejo Nacional de Trabajo y Promoción d<strong>el</strong>EmpleoPlan de Acción Nacional para erradicar trabajo forzoso;Acuerdo Tripartito: Plan Estratégico Institucional2007–2011.Paraguay 2009Gobierno, organizaciones empleadores y trabajadoresPrograma Nacional de Trabajo Dec<strong>en</strong>teRepública 2007DominicanaSecretaría de Trabajo, Confederación Patronal,organizaciones sindicalesAcuerdo Tripartito para <strong>el</strong> Programa Nacional deTrabajo Dec<strong>en</strong>te.Trinidad y 2008TobagoLabour Ministry, Ministries of Health, Education,Employers’ Consultative Association, National TradeUnion C<strong>en</strong>tre, NGOs-people living with HIVPolítica Nacional sobre VIH/SIDA <strong>en</strong> <strong>el</strong> lugar de Trabajo,aprobada por <strong>el</strong> Gabinete Ministerial (Cabinet ApprovedNational Workplace Policy for HIV/AIDS)Uruguay 2008Comisión Seguridad Social (Ministerios Economía,Trabajo, Desarrollo Social, Salud, Ofi cina Planifi cación,Banco Previsión Social), apoyados por Universidad de laRepública, UN, España.Conclusiones fi nales d<strong>el</strong> proceso de diálogo preparadopor la Comisión Ejecutiva d<strong>el</strong> Diálogo Nacional sobreSeguridad Social <strong>en</strong> Uruguay.Fu<strong>en</strong>te: OIT (2006). Trabajo dec<strong>en</strong>te <strong>en</strong> América <strong>Latina</strong> y <strong>el</strong> <strong>Caribe</strong> 2006-2010: un balance de las políticas laborales con r<strong>el</strong>ación a los propósitosy objetivos de la Ag<strong>en</strong>da Hemisférica de Trabajo Dec<strong>en</strong>te. Ginebra, Suiza: OIT.Estos progresos constituy<strong>en</strong> pasos r<strong>el</strong>evantes<strong>en</strong> <strong>el</strong> fortalecimi<strong>en</strong>to de las asociaciones detrabajadores y empleadores como actores sociales.No obstante, la sola exist<strong>en</strong>cia de estas instancias,ya sean perman<strong>en</strong>tes o ad hoc, no garantiza un bu<strong>en</strong>funcionami<strong>en</strong>to ni resultados concretos. De hecho,a pesar de la promoción creci<strong>en</strong>te de acuerdos y deespacios para <strong>el</strong> diálogo social, la región manti<strong>en</strong>eun claro desafío a la hora de favorecer un diálogosocial sustantivo y efici<strong>en</strong>te, que promueva acuerdossobre cuestiones sustanciales <strong>en</strong> <strong>el</strong> marco de laspolíticas sociales, laborales y, sobre todo, que déprioridad al cumplimi<strong>en</strong>to de lo pactado por lossignatarios. El diálogo social tampoco puede vers<strong>el</strong>imitado, únicam<strong>en</strong>te, a la institucionalización de lasinstancias que le sirv<strong>en</strong> de cauce ni a la negociacióncolectiva. Sin embargo, es importante apoyar demanera estructurada estos esfuerzos –algunosestán consolidados, otros son más incipi<strong>en</strong>tes–,fortaleci<strong>en</strong>do tanto los procesos de adopción deacuerdos como la capacidad de ejecución de dichosacuerdos. Por esta razón, sería deseable que estosespacios t<strong>en</strong>gan un mayor alcance ejecutivo y unmayor vínculo con los espacios legislativos.El diálogo social supone la creación de unaverdadera cultura de confianza y disposición a laconcertación <strong>en</strong>tre los actores sociales (trabajadoresy empleadores) y los gobiernos. En particular, <strong>el</strong>respeto de los gobiernos a la repres<strong>en</strong>tatividad ylegitimidad de las organizaciones sindicales y de losempleadores se configura como un factor clave quepermite incorporar a las organizaciones r<strong>el</strong>evantesa los procesos de diálogo y g<strong>en</strong>erar acuerdos con<strong>el</strong>las, no solo <strong>en</strong> materia de negociación colectivasino, <strong>en</strong> g<strong>en</strong>eral, <strong>en</strong> la facilitación de procesos deconsulta y <strong>en</strong> la definición e implem<strong>en</strong>tación demarcos de política social, económica y laboral, másallá de la duración de los mandatos políticos. Estees un aspecto que pres<strong>en</strong>ta evid<strong>en</strong>tes car<strong>en</strong>cias <strong>en</strong>la región. Es clave también <strong>el</strong> respeto mutuo <strong>en</strong>tregobiernos y actores sociales y <strong>en</strong>tre actores sociales,fom<strong>en</strong>tando su fortalecimi<strong>en</strong>to e indep<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia, locual es una precondición para g<strong>en</strong>erar una culturade confianza <strong>en</strong>tre los actores. Aunque no exist<strong>en</strong>datos de los niv<strong>el</strong>es de confianza <strong>en</strong>tre los actoressociales, datos reci<strong>en</strong>tes muestran, por ejemplo,una brecha considerable <strong>en</strong> los niv<strong>el</strong>es de confianza<strong>en</strong>tre las personas <strong>en</strong> América <strong>Latina</strong> <strong>en</strong> comparación
78El desafío de la promoción de empresas sost<strong>en</strong>ibles <strong>en</strong> América <strong>Latina</strong> y <strong>el</strong> <strong>Caribe</strong>Capítulo cincocon los países de altos ingresos de Europa. Según laEncuesta Mundial de Valores (World Values Survey),<strong>en</strong> ALyC, <strong>el</strong> 17% de las personas confía <strong>en</strong> los demás.En HIC-OCDE, ese índice llega al 41% 98 . En <strong>el</strong> anexo7 se pres<strong>en</strong>ta la distribución de países según <strong>el</strong>porc<strong>en</strong>taje de personas que confían <strong>en</strong> otros, y seaprecia la conc<strong>en</strong>tración de los países de ALyC <strong>en</strong> losporc<strong>en</strong>tajes más bajos y varios países de HIC-OCDE,<strong>en</strong> los más <strong>el</strong>evados 99 .Desde la perspectiva de las políticas públicas, serequiere seguir perfeccionando <strong>el</strong> marco legal einstitucional para facilitar un bu<strong>en</strong> desarrollo d<strong>el</strong>diálogo social, incluy<strong>en</strong>do la negociación colectiva,los procesos de consulta y otras manifestaciones d<strong>el</strong>diálogo social.5.4 Respeto de los derechos humanosuniversales y de las normas internacionalesd<strong>el</strong> trabajoLa competitividad debería fundarse <strong>en</strong> valores. El respeto d<strong>el</strong>os derechos humanos y de las normas internacionales d<strong>el</strong>trabajo, especialm<strong>en</strong>te la libertad sindical y de asociación yla negociación colectiva, la abolición d<strong>el</strong> trabajo infantil, d<strong>el</strong>trabajo forzoso y de todas las formas de discriminación, es unrasgo distintivo de las sociedades que han logrado integrar conéxito la sost<strong>en</strong>ibilidad y <strong>el</strong> trabajo dec<strong>en</strong>te. 100Respecto de la ratificación de los principalesconv<strong>en</strong>ios de las Naciones Unidas sobre derechoshumanos, así como los conv<strong>en</strong>ios fundam<strong>en</strong>tales d<strong>el</strong>a OIT sobre derechos laborales, se observa que lospaíses de la región, <strong>en</strong> su gran mayoría, han ratificadotodos estos instrum<strong>en</strong>tos, alcanzando e inclusosuperando <strong>el</strong> niv<strong>el</strong> de ratificaciones de HIC-OCDE.Sin embargo, a pesar de la gran cantidad de conv<strong>en</strong>iosfirmados por los países de la región <strong>en</strong> materia dederechos humanos y los avances <strong>en</strong> <strong>el</strong> respeto de losderechos políticos, subsist<strong>en</strong> déficits considerables.En los derechos económicos y sociales tambiénhubo progresos, pero la brecha de equidad <strong>en</strong>trericos y pobres sigue si<strong>en</strong>do uno de los retos másimportantes <strong>en</strong> la región. Algunos grupos, comolos pueblos indíg<strong>en</strong>as, las mujeres, los niños y losmigrantes, sigu<strong>en</strong> sufri<strong>en</strong>do de gran discriminación.La viol<strong>en</strong>cia r<strong>el</strong>acionada con la droga y la inseguridadpersist<strong>en</strong>te <strong>en</strong> la región ocasiona violaciones de los98World Values Survey Association (2009). World Values Survey 1981-2008. Official Aggregate v. 20090901. Estocolmo: World Values SurveyAssociation.99Como ha <strong>en</strong>fatizado <strong>el</strong> Banco Mundial, la confianza y <strong>el</strong> capitalsocial también pued<strong>en</strong> crear un ambi<strong>en</strong>te económico y políticoconduc<strong>en</strong>te al crecimi<strong>en</strong>to económico. Al mismo tiempo, factorescomo la desconfianza, discriminación, fragm<strong>en</strong>tación o desigualdadpued<strong>en</strong> influ<strong>en</strong>ciar si se crean empleos y de qué tipo. [Banco Mundial(2012b). World Dev<strong>el</strong>opm<strong>en</strong>t Report 2013. Jobs. Washington, D. C.: BM].100OIT (2008a). Op. cit.derechos más básicos, como <strong>el</strong> derecho a la vida, <strong>el</strong>derecho a la seguridad personal y a la libertad, ademásde los perjuicios económicos. La región todavía ti<strong>en</strong>eun largo camino por recorrer <strong>en</strong> la consolidación d<strong>el</strong>estado de derecho y <strong>en</strong> garantizar a los ciudadanos <strong>el</strong>cumplimi<strong>en</strong>to de sus derechos más básicos.En lo refer<strong>en</strong>te a los derechos laborales, <strong>en</strong> particulara los principios y derechos fundam<strong>en</strong>tales <strong>en</strong> <strong>el</strong>trabajo, se han producido progresos significativos conlas ratificaciones de los conv<strong>en</strong>ios fundam<strong>en</strong>tales y laadopción de medidas concretas para su aplicación<strong>en</strong> 9 países; mi<strong>en</strong>tras que <strong>en</strong> otros, los avances hansido más limitados. No obstante, sigue habi<strong>en</strong>doviolaciones importantes de estos preceptos.Con respecto a la libertad sindical y la negociacióncolectiva, ALyC es una de las regiones con másratificación de los conv<strong>en</strong>ios respectivos, pero no esposible medir <strong>el</strong> respeto a los principios consagrados<strong>en</strong> los conv<strong>en</strong>ios ni las condiciones <strong>en</strong> que estos seejerc<strong>en</strong>. Más allá de las estadísticas, es importanteseñalar que <strong>el</strong> <strong>en</strong>torno de las empresas sost<strong>en</strong>iblesrequiere de organizaciones de empleadores ytrabajadores, sólidas, repres<strong>en</strong>tativas y r<strong>el</strong>evantes,no solo <strong>en</strong> los servicios que prestan a sus afiliadossino también <strong>en</strong> <strong>el</strong> pap<strong>el</strong> que, como interlocutoressociales, desempeñan <strong>en</strong> los procesos de diseñoe implem<strong>en</strong>tación de las propuestas e iniciativasg<strong>en</strong>eradas <strong>en</strong> las instancias públicas, y que impactan<strong>en</strong> la vida socioeconómica y laboral de los países.No obstante, ha quedado <strong>en</strong> evid<strong>en</strong>cia que, tanto<strong>en</strong> las organizaciones de trabajadores como <strong>en</strong> lasde empleadores de la región, se han violado losprincipios y derechos consagrados <strong>en</strong> los Conv<strong>en</strong>iosN° 87 y N° 98 <strong>en</strong> varias ocasiones. América <strong>Latina</strong> esla región con mayor número de quejas de libertadsindical, hecho que lleva a difer<strong>en</strong>tes interpretaciones<strong>en</strong> los actores.En r<strong>el</strong>ación con la no discriminación por género, todoslos países de la región han ratificado los conv<strong>en</strong>iossobre igualdad de remuneración y discriminación<strong>en</strong> materia de empleo y ocupación, pero persist<strong>en</strong>importantes brechas <strong>en</strong>tre hombres y mujeres (véase<strong>el</strong> capítulo sobre <strong>el</strong> contexto social para <strong>el</strong> análisis deestas brechas).Respecto d<strong>el</strong> trabajo infantil, las medicionescuantitativas disponibles indican la persist<strong>en</strong>ciad<strong>el</strong> f<strong>en</strong>óm<strong>en</strong>o, a pesar de los importantes avances<strong>en</strong> cuanto a su erradicación <strong>en</strong> algunos países. Losavances se han materializado con la creación decomités nacionales, memorandos de <strong>en</strong>t<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>tocon la OIT y la inclusión de la problemática <strong>en</strong>las políticas públicas. Asimismo, los conv<strong>en</strong>iosfundam<strong>en</strong>tales sobre trabajo infantil han sidoratificados por casi todos los países de la región,si<strong>en</strong>do esta <strong>en</strong> donde se ha registrado la reducciónmás significativa de trabajo infantil durante la