Nuevas adicciones - Proyecto Hombre
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CAPÍTULO 12<br />
no sorprenden si tenemos en cuenta que, sobre todo, antes se llamaba<br />
más a party-lines, teléfonos eróticos. Algunas personas, curiosamente,<br />
reconocen que sabían perfectamente que la party-line estaba amañada,<br />
que siempre es la misma gente, refiriéndose a la gente que trabaja en<br />
las líneas 906. Pero ellos seguían llamando. De sobra es sabido los<br />
frecuentes fraudes que se dan en estas líneas: llame usted mañana<br />
para darnos más datos y buscar su pareja ideal. Timos que prometen<br />
encuentros y contactos que no se llegan a producir.<br />
Ahora aparecen los smart-phones, una mezcla de teléfono y agenda<br />
con conexión a la Red para poder recibir los correos electrónicos,<br />
para algunos un aparato ideal, para otros un “tecnoestrés” que hace<br />
furor entre los profesionales en Estados Unidos al poder estar conectados<br />
a su trabajo las 24 horas. Hoy en día ya sería anticuado hablar<br />
sólo de teléfonos móviles.<br />
Este sería un buen momento para la prevención, ya que en cuestión<br />
de <strong>adicciones</strong> siempre llegamos tarde. Aprender a organizar el<br />
tiempo de ocio, a usar las nuevas tecnologías para no depender nosotros<br />
de ellas, para que no sean una prolongación insidiosa de nuestra<br />
identidad, aprender a generar control internamente, saber separar y<br />
guardar distancia. Aprender a gestionar la ansiedad y lo emocional<br />
sin emplear mal las nuevas tecnologías. Saber perder el hilo de la<br />
repetición angustiosa sin fin de las nuevas tecnologías como vínculo<br />
emocional, saber posponer, parar y controlar toda esa fuente inagotable<br />
de estimulación, brillos, sonidos, etc. Apreciar el estar solo y<br />
saber estar solo sin tener tres aparatos a tu alrededor. Saber perder el<br />
tiempo. Atribuir confianza al usuario para que él mismo salga del<br />
automatismo y de los círculos repetitivos. Atribuir responsabilidad<br />
para resolver “problemas”, entender lo que significa y qué función<br />
tiene la repetición cegadora para la persona. A fin de cuentas, empezar<br />
a crear y escapar del cortocircuito.<br />
En este caso vemos que la dependencia tiene sutiles diferencias.<br />
No sólo se mantienen conversaciones interminables con otras personas,<br />
sino que constantemente están pendientes de tener cobertura,<br />
tener cargado el móvil, comprobar repetidas veces si ha llegado un<br />
mensaje o si “tienen algo” en el buzón de voz. Se cambia de compañía<br />
frecuentemente, se personaliza el móvil. Antes de sentarse en<br />
el sofá colocan el móvil al lado y así en todo tipo de situaciones,<br />
afeitándose, haciendo la comida.<br />
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