Nuevas adicciones - Proyecto Hombre
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NUEVAS ADICCIONES: ¿ADICICIONES NUEVAS?<br />
inconvenientes de contar con multiplicidad de subtipos, donde casi<br />
todo es un trastorno y donde los síntomas de unos se mezclan con<br />
los de otros, como en este caso.<br />
Otra manera de entender la psicopatología es desde posiciones psicoanalíticas<br />
que se han mantenido como única alternativa al DSM-<br />
IV y al CIE X. “Las <strong>adicciones</strong> se pueden dar tanto en la neurosis<br />
como en la psicosis y en la perversión”, Borderías (2001), donde<br />
cobraría más importancia lo que narra y cuenta la persona. La dirección<br />
de la cura parte de analizar la estructura pulsional, su relación<br />
con el otro, con el objeto adictivo en este caso. Analizar la intención<br />
del síntoma al retirarse o ir hacia un estigma que lleva a la alienación;<br />
en definitiva, analizar caso por caso, identificando el problema,<br />
que es particular en cada situación. Esta función del síntoma habría<br />
que entenderla dentro de la estructura de la persona.<br />
Para evitar caer en el laberinto y la invención infinita de los diagnósticos<br />
nos podemos quedar con el trastorno adictivo probado, que<br />
se muestra como no tóxico, y muestra tolerancia tanto psicológica<br />
como física. Uno de los estudios más rigurosos realizados en España<br />
sobre Internet nos muestra que “un 4,9% de los encuestados afirman<br />
tener problemas frecuentes con la Red, sentimientos de culpa, deseo<br />
intenso de estar conectados, pérdida de control, mayor ansiedad y disfunción<br />
social”, Gracia, Vigo, Pérez, Marcó (2002). La llamada “adicción”<br />
a la Red se muestra sutil, compleja en su presentación; uno<br />
puede no ser adicto a la pornografía pero sí abusar noche tras noche<br />
de los chats, o viceversa, y lo mismo en cualquiera de sus variantes,<br />
las cuales poco tienen que ver en sus significantes unas con otras.<br />
Como afirmaba el profesor Roberto Balaguer, una persona enredada<br />
en los chats no es lo mismo que una que juega. En el caso de los<br />
chats, podemos encontrar una persona que demanda relaciones y que<br />
lo intenta, frente a otra que prefiere quedarse días y días encerrada y<br />
aislada en su habitación jugando. Ante esto pondremos atención más<br />
que nunca en el análisis del caso por caso, sin perder de vista en<br />
ningún momento la individualidad de cada persona.