Nuevas adicciones - Proyecto Hombre
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NUEVAS ADICCIONES: ¿ADICICIONES NUEVAS?<br />
nismos psíquicos estructurales, a la par que el análisis del proceso,<br />
consistente en qué tipos de función, implicación, defensas y responsabilidad<br />
cumple el síntoma en la estructura de la persona concreta.<br />
14.2. DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL<br />
Lo diferenciamos del trastorno límite y los estados maníacos o<br />
hipomaníacos. La adicción al sexo no se debe a la fluctuación anímica<br />
sino que es algo continuado en el tiempo. Muchas veces los criterios<br />
de diagnóstico son difusos, como en el caso de concretar la<br />
dependencia a líneas telefónicas eróticas o hot-lines. Decimos esto<br />
porque los dependientes de estos servicios, en general personas tímidas<br />
y apocadas, son clasificadas igualmente como “adictos al sexo”, y en<br />
este punto no hemos avanzado mucho, ya que Freud, hace más de un<br />
siglo, concretamente en 1890, señaló que “escuchar cintas con contenidos<br />
eróticos debería considerarse una variante del voyeurismo pero<br />
en su modalidad auditiva”, Amparo, Ramos, Sandín (1995).<br />
14.3. ABSTINENCIA Y TOLERANCIA, SUS SÍNTOMAS<br />
Por lo regular se ha hablado mucho de la abstinencia, pero poco<br />
de la tolerancia. Lo cierto es que en la persona adicta al sexo aumenta<br />
la tolerancia, es decir, cada día vive más obsesionada por el sexo, por<br />
una nueva conquista, a semejanza de los adictos a las sustancias.<br />
“Una persona de unos cuarenta y cinco años que durante un tiempo<br />
vivió completamente enganchada al sexo, tanto que frecuentaba asiduamente<br />
casi todos los clubes de prostitución de la región, ejercía<br />
como una especie de magnetismo compulsivo, con el consiguiente<br />
miedo y angustia a que lo descubriera su mujer, a contraer el sida<br />
y al descalabro económico; sin embargo, le resultaba imposible<br />
dejarlo”, (Isidoro Martín 2001).<br />
Otros casos tienen dificultad en la adherencia al tratamiento, ya<br />
que desde un primer momento intentan ligar con el/la terapeuta, o no<br />
llegan a la primera entrevista: “El paciente no llegó a entrar a la primera<br />
sesión de la consulta, en la misma sala de espera dijo que con<br />
ese dinero se podía ir a un club”, (Fernando Pérez del Río 2000).