30.04.2013 Views

La-monta%C3%B1a-es-algo-m%C3%A1s-que-una-inmensa-estepa-verde

La-monta%C3%B1a-es-algo-m%C3%A1s-que-una-inmensa-estepa-verde

La-monta%C3%B1a-es-algo-m%C3%A1s-que-una-inmensa-estepa-verde

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

sentimientos muy particular<strong>es</strong>, muy característicos r<strong>es</strong>pecto de la tierra.<br />

Incluso, el camp<strong>es</strong>ino a vec<strong>es</strong> te habla de la tierra como <strong>algo</strong> sagrado, como si te<br />

<strong>es</strong>tuviera hablando de <strong>una</strong> madre. Pero a vec<strong>es</strong> también el camp<strong>es</strong>ino te habla de la<br />

tierra como si fuera <strong>una</strong> mujer: "yo la hago producir" te dice, "yo la agarro, la<br />

limpio". Te dice: "aquí la tengo", y claro, se encariñaba con el pedacito de<br />

tierra <strong>que</strong> le daba el terrateniente para producir... limpiaban la tierra, la<br />

socolaban, la sembraban, la cosechaban... El camp<strong>es</strong>ino machetea la vegetación<br />

para sembrar, pero vos sentís <strong>que</strong> aun<strong>que</strong> sea <strong>una</strong> cu<strong>es</strong>tión violenta, al fin y al<br />

cabo lo de la socola <strong>es</strong> <strong>una</strong> cu<strong>es</strong>tión muy tierna entre él y la tierra, <strong>una</strong><br />

relación de cariño muy particular. Entonc<strong>es</strong>, el camp<strong>es</strong>ino, además de <strong>que</strong> nec<strong>es</strong>ita<br />

la tierra para hacerla producir para vivir de ella, tiene la particularidad de<br />

<strong>que</strong> la ama como elemento material de su existencia.<br />

Nosotros nunca le prometimos <strong>una</strong> reforma agraria a los camp<strong>es</strong>inos jamás se lo<br />

prometimos! Nosotros a los camp<strong>es</strong>inos los invitamos a luchar y a combatir para<br />

conseguir la reforma agraria. Los invitamos a combatir por la tierra, claro,<br />

¡para el camp<strong>es</strong>ino <strong>es</strong>o era <strong>una</strong> tentación demasiado grande! ¿Cómo aguantarse y no<br />

combatir por lo <strong>que</strong> para él <strong>es</strong> madre, mujer, medio de vida, cariño, sentimiento,<br />

relación secreta, como <strong>es</strong> la tierra? Era muy difícil <strong>que</strong> el camp<strong>es</strong>ino renunciara<br />

a combatir sobre todo cuando uno le va d<strong>es</strong>pertando el sentimiento y la idea de la<br />

lucha de clas<strong>es</strong>.<br />

El camp<strong>es</strong>ino no sólo logra d<strong>es</strong>arrollar, cómo dijimos, sentimientos afectivos,<br />

sino <strong>que</strong> los sentidos, las cu<strong>es</strong>tion<strong>es</strong> sensorial<strong>es</strong>, las d<strong>es</strong>arrolla más con<br />

r<strong>es</strong>pecto a la tierra... ¿v<strong>es</strong>? él tiene más tacto, su tacto <strong>es</strong> más fino con la<br />

tierra, el olfato lo d<strong>es</strong>arrolla en función de la tierra. El te dice: "tierra<br />

<strong>que</strong>mada, tierra sembrada, tierra socolada, tierra mojada", lo <strong>que</strong> sea... el<br />

crimen mas grande de la dictadura era negarle la tierra al camp<strong>es</strong>ino, por<strong>que</strong><br />

negarle la tierra era como mantener muertos, viviendo ahí errant<strong>es</strong>. El camp<strong>es</strong>ino<br />

sin tierra <strong>es</strong> como un zombi, <strong>es</strong>tá sacado de su elemento. Sin su elemento <strong>es</strong>tá<br />

d<strong>es</strong>garrado.<br />

Es por <strong>es</strong>o <strong>que</strong> animal<strong>es</strong> del campo, mujer e hijos y tierra <strong>es</strong> todo un elemento, <strong>es</strong><br />

un conjunto en el camp<strong>es</strong>ino, <strong>es</strong> su universo indivisible. Por <strong>es</strong>o te digo <strong>que</strong> el<br />

camp<strong>es</strong>ino <strong>que</strong> no tiene tierra <strong>es</strong> un hombre incompleto, <strong>es</strong> un hombre sin alma. El<br />

alma del camp<strong>es</strong>ino <strong>es</strong> la tierra, <strong>es</strong> el elemento <strong>que</strong> le da vida, <strong>que</strong> lo mueve,<br />

por<strong>que</strong> él la quiere no sólo para cosechar y para vivir de la tierra como tienen<br />

<strong>que</strong> vivir los hombr<strong>es</strong> de la tierra... sino <strong>que</strong> además se enamora de ella, guarda<br />

<strong>una</strong> relación íntima con ella y la mujer y los hijos son parte de <strong>es</strong>a misma<br />

relación.<br />

D<strong>es</strong>pués de hablar bastante, ya como a las nueve de la noche, me volvía a la peña<br />

a acostar; por supu<strong>es</strong>to <strong>que</strong> nunca te dormís inmediatamente, siempre <strong>es</strong>tás<br />

pensando, oyendo los ruidos de la noche, a vec<strong>es</strong> los ladridos de los perros del<br />

rancho, <strong>es</strong>cuchando un poquito de música, ponés Radio Habana, y a<strong>que</strong>lla campanita<br />

de la señal de entrada de Radio Habana-Cuba, oía "El Momento" de las diez de la<br />

noche, o ponía la "Equis" para oír un poco de música, pensaba en mi familia en<br />

León... Recuerdo <strong>que</strong> <strong>una</strong> de las noch<strong>es</strong> en <strong>es</strong>a peña, <strong>es</strong>tuve recordando cuando bajé<br />

de la montaña a León ya cland<strong>es</strong>tino, y <strong>es</strong>tando <strong>una</strong> noche en la casa de seguridad<br />

había empezado a experimentar un montón de sensacion<strong>es</strong>; y <strong>una</strong> de las sensacion<strong>es</strong><br />

<strong>que</strong> más experimenté fue la sensación del absurdo. En la montaña las distancias<br />

eran kilométricas, digamos ocho días, siete días, un m<strong>es</strong>.<br />

Para irse de un lado a otro eran lo mínimo tr<strong>es</strong> horas, ¿ya?, para ir a buscar<br />

leña, era <strong>una</strong> hora, o media hora, ¡difícil! no solamente por la distancia, sino<br />

también por el terreno, por<strong>que</strong> implicaba subir y bajar, caminatas de medio día, o<br />

de dos horas, implicaba frío, implicaban no sé cuántos rayon<strong>es</strong> en las manos, no<br />

se cuántas caídas, no sé cuántos dolor<strong>es</strong> físicos, implicaba el maldito cansancio<br />

en las piernas, en el pecho, en los pulmon<strong>es</strong>; <strong>es</strong> decir, siempre ir de un lugar a<br />

otro implicaba sacrificio, tiempo, implicaba dolor. Entonc<strong>es</strong> <strong>es</strong>tando allá en León<br />

sentí la gran curiosidad de saber de mi familia. Pregunté por mi mamá a los<br />

compañeros <strong>que</strong> <strong>es</strong>taban allí, ¿qué sabían de ella?, <strong>que</strong> me dieran información,<br />

¿cómo <strong>es</strong>taba mi mamá?, ¿cómo había reaccionado?, ¿cómo <strong>es</strong>taba haciendo para<br />

111

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!