La-monta%C3%B1a-es-algo-m%C3%A1s-que-una-inmensa-estepa-verde
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máquinas de <strong>es</strong>cribir, <strong>que</strong> teníamos fotocopiadoras, <strong>que</strong> teníamos mimeógrafos para<br />
imprimir y lo <strong>que</strong> era mejor aún: DINERO. Es decir, el ascenso del FER al CUUN nos<br />
permitió hacer uso de las <strong>es</strong>tructuras legal<strong>es</strong> y públicas de la universidad para<br />
d<strong>es</strong>arrollar trabajos del FSLN, del FER y trabajos del CUUN. Hasta entonc<strong>es</strong><br />
nosotros habíamos costeado al FER con las cuotas <strong>que</strong> dábamos semanalmente, y <strong>es</strong>o<br />
era demasiado poco.<br />
Ahí se nos dio un problema en chiquito, igual al problema <strong>que</strong> se nos da ahora en<br />
grande. Aun<strong>que</strong> nos hacían falta cuadros para el trabajo del FER, ahora teníamos<br />
<strong>que</strong> sacar cuadros del FER para atender el CUUN; nu<strong>es</strong>tro primer hombre <strong>que</strong> era el<br />
Gato, el más experimentado del FER, el más viejo del FER, tenía <strong>que</strong> dedicarse al<br />
CUUN, d<strong>es</strong>plegar toda <strong>una</strong> labor política, pero también ponerse al frente de las<br />
reivindicacion<strong>es</strong> más sentidas de los <strong>es</strong>tudiant<strong>es</strong>, para <strong>que</strong> los <strong>es</strong>tudiant<strong>es</strong><br />
<strong>es</strong>tuvieran contentos con la g<strong>es</strong>tión nu<strong>es</strong>tra, para <strong>que</strong> los <strong>es</strong>tudiant<strong>es</strong> vieran la<br />
ventaja y lo positivo de <strong>que</strong> el FER <strong>es</strong>tuviera en el poder en la universidad y<br />
volvieran a votar por nosotros el año entrante. Para nosotros <strong>es</strong>to era <strong>una</strong><br />
nec<strong>es</strong>idad por<strong>que</strong> a través de las luchas reivindicativas del CUUN podíamos seguir<br />
captando para el FER a los compañeros <strong>que</strong> más se d<strong>es</strong>tacaban. Y, como te decía,<br />
nos permitía ocupar las <strong>es</strong>tructuras y los recursos económicos del CUUN para<br />
invertirlos en propaganda para el trabajo, no sólo del CUUN y del FER sino del<br />
FSLN.<br />
Ant<strong>es</strong> teníamos <strong>que</strong> robar en la universidad, nos metíamos a las dependencias<br />
administrativas; los bolsos de las compañeras eran famosos por<strong>que</strong> ahí echábamos<br />
engrapadoras, r<strong>es</strong>mas de papel, crayon<strong>es</strong> para hacer afich<strong>es</strong>, nos robábamos goma,<br />
grapas... Todo lo <strong>que</strong> nos podíamos robar, lo robábamos. Y qué alegría la de<br />
nosotros cuando conseguíamos doscientos p<strong>es</strong>os para comprar diez sprays y hacer<br />
cartulinas, mantas, y pintar las pared<strong>es</strong> de la universidad y de la ciudad.<br />
Mantener el poder en el CUUN significaba tener dinero para todo <strong>es</strong>o.<br />
A partir de <strong>que</strong> el FER triunfó en la universidad los robos d<strong>es</strong>cendieron<br />
sensiblemente en el Alma Máter. Uno <strong>es</strong> bandido cuando <strong>es</strong> <strong>es</strong>tudiante, ¿verdad? Y<br />
me <strong>es</strong>toy acordando <strong>que</strong> los bolsos de las compañeras no sólo los ocupábamos para<br />
<strong>es</strong>o, sino <strong>que</strong> también para otras cosas: para robar en los supermercados. Y me<br />
acuerdo <strong>que</strong> también para <strong>algo</strong> más, <strong>que</strong> no sé si l<strong>es</strong> vaya a gustar a algunos<br />
puritanos; entre nosotros teníamos un sindicato de parejas y nos daba miedo <strong>que</strong><br />
las compañeras salieran embarazadas. ¿Y cómo aguantarse uno durante el ciclo<br />
natural de la compañera? <strong>La</strong> salida era buscar anticonceptivos. Pero como los<br />
anticonceptivos eran muy caros, entonc<strong>es</strong> d<strong>es</strong>cubrimos <strong>que</strong> en <strong>una</strong> farmacia <strong>que</strong><br />
<strong>que</strong>daba de donde Prío media cuadra abajo, <strong>que</strong> era la farmacia Balladar<strong>es</strong>, en el<br />
extremo derecho en la primera gaveta <strong>es</strong>taban los anticonceptivos.<br />
En <strong>es</strong>e ángulo del mostrador había un sitio donde colocaban revistas: Vanidad<strong>es</strong>,<br />
Ecran, Siete Días, Seleccion<strong>es</strong> del Reader’s Dig<strong>es</strong>t y toda suerte de literatura<br />
calificada. ¡Ni dudarlo! ¡A robar anticonceptivos se ha dicho! El operativo era<br />
el siguiente: llegábamos las dos o las tr<strong>es</strong> parejas, pero nunca <strong>una</strong> sola; como<br />
éramos conspirador<strong>es</strong>, ya sabíamos a qué hora del día había menos personal en la<br />
farmacia: al mediodía, a la hora del almuerzo. Sólo <strong>que</strong>daba <strong>una</strong> mujer, pelito<br />
corto, v<strong>es</strong>tida de blanco, con <strong>una</strong> gran cara de aburrida... más <strong>que</strong> de aburrida,<br />
de amargada. Entonc<strong>es</strong> llegábamos y <strong>una</strong> pareja le montaba un operativo de<br />
distracción; preguntábamos por <strong>una</strong> medicina <strong>que</strong> ya sabíamos <strong>que</strong> <strong>es</strong>taba en el<br />
extremo opu<strong>es</strong>to y en la parte de arriba, de suerte <strong>que</strong> la mujer para poder<br />
d<strong>es</strong>pacharía tenía <strong>que</strong> subirse encima de <strong>una</strong> silla y dar la <strong>es</strong>palda totalmente a<br />
la gaveta en la <strong>que</strong> <strong>es</strong>taban los anticonceptivos. Entonc<strong>es</strong> la otra pareja se ponía<br />
como <strong>que</strong> <strong>es</strong>taba viendo revistas, como <strong>que</strong> <strong>es</strong>taba viendo.., y ¡fas! abría la<br />
gaveta. Yo recuerdo <strong>que</strong> cuando me tocaba a mí, abría la mano todo lo <strong>que</strong> podía,<br />
hasta <strong>que</strong> me <strong>que</strong>daban tilint<strong>es</strong> los dedos y cuando cerraba el puño encima de los<br />
anticonceptivos agarraba lo más <strong>que</strong> podía. <strong>La</strong> compañera <strong>que</strong> ya <strong>es</strong>taba a mi<br />
<strong>es</strong>palda cubriéndome por cualquier cosa y vigilando a la mujer <strong>que</strong> d<strong>es</strong>pachaba la<br />
medicina en el otro extremo, echaba los anticonceptivos en el bolso de la<br />
compañera y el operativo <strong>que</strong>daba cerrado. Recuerdo <strong>que</strong> eran <strong>una</strong>s inyeccion<strong>es</strong> <strong>que</strong><br />
tenían un m<strong>es</strong> de efectividad, ¿te imaginás vos lo <strong>que</strong> <strong>es</strong> <strong>es</strong>o? Un m<strong>es</strong> sin<br />
preocupacion<strong>es</strong>, sin tension<strong>es</strong>...<br />
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