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F I L I P E N S E S - MINTS español

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Curso de <strong>MINTS</strong> Filipenses: El Evangelio de Gozo Prof. Eric Pennings<br />

Comentario Sobre Filipenses 3:12 - 4:1<br />

Gozo en la Salvación por Cristo – 3:2 - 4:1<br />

3.2) 3:12-4:1 – El Galardón de la Salvación: Vida Eterna<br />

En el capítulo anterior del presente curso de Filipenses introducimos el capítulo 3 con un comentario<br />

de que en el capítulo, Pablo presente tres fases de su auto-biografía:<br />

1) Su pasado (3:2–11) – Descubriendo virtudes nuevos al haber conocido a Cristo<br />

2) Su presente (3:12-16) – El atleta que prosigue hacia la meta de la carrera<br />

3) Su futuro (3:17-21) – El que tiene sus ojos puestos en la ciudadanía celestial<br />

En el presente capítulo del curso, entonces, nos toca hacer un estudio sobre la autobiografía de Pablo<br />

en cuanto a su vida presente (3:12-16) y su vida futuro (3:17-21). Notamos en el v. 11 que Pablo está<br />

pensando en cómo la glorificación en el futuro impacta la vida que está viviendo actualmente. En los<br />

versículos que concluyen el capítulo 3, Pablo pone su mirada, y la de sus lectores, en el galardón final<br />

de la vida cristiana: la salvación, en particular, la vida eterna.<br />

En Filipenses 3:2-11 tocamos el tema de la justificación. En Filipenses 3:12-21 Pablo presenta<br />

consideraciones que nos lleva al tema de la santificación. Louis Berkhof nos ofrece una definición de la<br />

santificación es, “una operación divina en el alma, por medio de la cual, aquella disposición santa<br />

nacida en la regeneración queda fortalecida y se aumenta su santa actividad.” 79 El segundo rey de<br />

Israel, Salomón, describe la santificación de la siguiente manera: “Mas la senda de los justos es como<br />

la luz de la aurora, que va en aumento hasta que el día es perfecto” (Proverbios 4:18).<br />

Las tres personas de la trinidad tienen un papel distinta en la salvación del ser humano. Dios el Padre<br />

determina quienes serán los suyos y establece los requisitos de la salvación (originando la salvación),<br />

Dios el Hijo hace la obra redentora para satisfacer los requisitos para la salvación establecidos por el<br />

Padre (el mediador de la salvación), y Dios el Espíritu Santo es el que obra en el corazón del ser<br />

humano para aplicar la salvación (efectuando la salvación) en el proceso de santificación.<br />

Se puede hablar de la santificación en tres aspectos:<br />

1) El aspecto posicional es una santificación inmediata en la cual el creyente es declarado santo por<br />

haber sido apartado por Dios. El aspecto inmediato es entendido por la raíz de la palabra que se<br />

encuentra en la palabra ‘santo’ (ἅγιος – hagios). La palabra significa ‘apartado’. En su origen el<br />

concepto es restringido a una caracterización de Dios en su santidad propia, su naturaleza perfecta,<br />

apartada de todo mal. Pero en la aplicación del concepto al ser humano, no estamos hablando de<br />

una santidad propia, sino una santidad derivada de Dios. Es el acto inmediato en el cual Dios nos<br />

declara justo, tal como si estuviéramos sin pecado, perfectos, apartados del mal, solo por lo méritos<br />

de la obra de Jesucristo.<br />

2) El aspecto práctico es una santificación progresiva de la vida cristiana aquí en la tierra en la cual el<br />

discípulo crece más y más en su conocimiento de Dios y en el proceso de vivir más y más según la<br />

semejanza de nuestro ejemplo divino, Jesucristo. La enseñanza en Filipenses 2 de imitar a Cristo es<br />

central en entender el aspecto práctico de la santificación progresiva.<br />

3) El aspecto definitivo es una santificación perfecta que logramos en el cielo en la cual el creyente<br />

llega a lo que Pablo describe en Efesios 5:27, “… a fin de presentársela a sí mismo, una iglesia<br />

gloriosa, que no tuviese mancha ni arruga ni cosa semejante, sino que fuese santa y sin mancha.”<br />

79 Berkhof. Pág. 638.<br />

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