Por el tamaño <strong>de</strong> escala presupuestal, <strong>los</strong> ayuntamientos metropolitanos cuentancon mayores recursos <strong>para</strong> conformar estructuras municipales consolidadas. Asílas cosas, existen otros ayuntamientos que apenas pue<strong>de</strong>n contratar <strong>los</strong> servicios<strong>de</strong> personal secretarial.Gráfica 5Número <strong>de</strong> personas que integran la contraloria municipal703060255020Número <strong>de</strong> municipios4030MUNICIPIOSPERSONAS%15Porcentaje102010501 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21MUNICIPIOS 7 26 19 14 8 4 2 4 3 1 2 1 3 1 1 1 1 1 1 1 1PERSONAS 1 2 3 4 5 6 7 8 9 11 12 13 16 17 20 21 34 38 50 52 63% 6.9 26 19 14 7.8 3.9 2 3.9 3 1 2 1 2.9 1 1 1 1 1 1 1 1Fuente: Cuestionarios sobre la organización <strong>de</strong> contralorías municipales en el Estado <strong>de</strong> México,Contraloría <strong>de</strong>l Po<strong>de</strong>r Legislativo <strong>de</strong>l Estado <strong>de</strong> México, 2004018
Un segmento <strong>de</strong> 8 municipios contrató a 5 personas, 6 ayuntamientos a 4 y 2 mása 7. En el caso opuesto, 8 contralorías municipales señalaron que contrataronpersonal entre un rango que va <strong>de</strong> 17 a 63 personas. En 3 municipios secontrataron a 9 personas, en uno a 11, en 2 a 12, en 1 a 13 y en 4 a 8. La plantilla<strong>de</strong> funcionarios municipales en 102 ayuntamientos ascendió a 392 integrantes en2004.Recurrentemente, el problema que enfrenta la Contraloría Municipal es elsiguiente: como el contralor municipal es una persona <strong>de</strong> confianza <strong>de</strong>l presi<strong>de</strong>ntemunicipal, aún cuando exista la voluntad <strong>de</strong>l alcal<strong>de</strong> <strong>para</strong> <strong>control</strong>ar y vigilar elmanejo <strong>de</strong> recursos públicos, no necesariamente el resto <strong>de</strong> <strong>los</strong> funcionarioselectos y <strong>de</strong>signados se sumarán a esta política. El grado <strong>de</strong> <strong>control</strong> <strong>de</strong>l principal(el Presi<strong>de</strong>nte Municipal) sobre su agente (la burocracia), las modalida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> sueficiencia, variarán <strong>de</strong> un ayuntamiento a otro, <strong>de</strong>bido a que las burocracias sonfrecuentemente indiferentes y no son sancionadas por <strong>los</strong> electores en las urnas,aunque si, ante <strong>los</strong> órganos <strong>de</strong> fiscalizadores <strong>de</strong>l congreso, como la contraloríainterna y el Órgano Superior <strong>de</strong> Fiscalización.El i<strong>de</strong>al <strong>de</strong> las administraciones municipales consiste, en que las agendas <strong>de</strong> lasautorida<strong>de</strong>s electas persigan <strong>los</strong> mismos objetivos <strong>de</strong> las burocracias. De ahí quela <strong>de</strong>mocracia electoral esté seriamente cuestionada, en razón <strong>de</strong> que lasautorida<strong>de</strong>s electas suelen imponer agendas <strong>de</strong> gobierno, que no se i<strong>de</strong>ntificancon las necesida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> la comunidad y toman <strong>de</strong>cisiones sin tener contactocercano con fuentes primarias <strong>de</strong> información (anuarios, registros administrativos,cuenta pública, entre otros).Un conjunto <strong>de</strong> preguntas <strong>de</strong>ben ser revisadas en todo proceso <strong>de</strong><strong>de</strong>scentralización: “Por qué, cuando y cómo ésta <strong>de</strong>be ser estimulada, quétérminos medios están involucrados; en qué sectores y <strong>para</strong> qué funciones<strong>de</strong>bería introducirse primero; qué formas específicas <strong>de</strong>bería tomar ésta; haciacuáles niveles <strong>de</strong> gobierno pue<strong>de</strong> ser más fácilmente implementada; y quéprecauciones o medidas correctivas <strong>de</strong>berán ser introducidas <strong>para</strong> un mejorfuncionamiento <strong>de</strong> la administración.” 66 Prud´homme, Rémy, On the Dangers of Decentralization, Policy Research Working Paper, No.1252, The World Bank, Febrero <strong>de</strong> 1994, pp.1-2.19