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<strong>By</strong> <strong>Luis</strong> <strong>Vallester</strong> "Valle <strong>Vallester</strong>"<br />
40 LAURETTA <strong>BENDER</strong><br />
organiza alrededor de las primitivas espirales cerradas con tendencias hacia determinadas<br />
direcciones (generalmente dextrorsas y horizontales al comienzo) y conducta<br />
perseverativa. Existe un constante interjuego o integración entre los caracteres motores y<br />
los sensoriales, a los que jamás puede separarse, aunque uno u otro as capaz de avanzar<br />
con mayor rapidez durante el proceso de maduración e incluso aparecer como dominante<br />
en una cierta etapa de la evolución guestáltica.<br />
Para Koffka todo adquisición motora, aun durante el desarrollo, tiene un componente<br />
sensorial. Katz sostiene, asimismo, quo el movimiento as una condición necesaria para la<br />
percepción, al menos en las primeras etapas del desarrollo. Así, pues, el organismo<br />
constituye un todo unitario, o no es organismo en absoluto. Köhler considera que la<br />
conducta no es la respuesta del organismo a un estímulo, sino la respuesta del organismo<br />
a su propia organización sensorial del estímulo. Por esa razón, el niño responde a una<br />
concepción del mundo mucho más simple que el adulto. Hartmann habla de una mayor<br />
unidad dinámica en el niño, de donde restu1ta que el aislamiento de una sola acción<br />
ofrece mucho mayor dificultad para éste que para e1 adulto. Cita este autor los<br />
experimentos que hizo con la caja de colores de Köhler, que llevó a cabo con su hija de 3<br />
años, para demostrar que las primitivas e innatas respuestas perceptuales del niño<br />
destacan las totalidades y los conjuntos. En los dibujos infantiles espontáneos pueden<br />
encontrarse principios similares.<br />
En 1931 12 me interesé en los dibujos espontáneos que los niños trazan con tiza en las<br />
aceras y pavimentos de los parques. Los numerosos pequeños parques que existen en el<br />
este de Nueva York proporcionan un rico material durante la primavera y el otoño, época<br />
en las que están cubiertos de dibujos infantiles. Hasta el presente no se han realizado<br />
estudios sistemáticos acerca de ellos, a pesar de que ofrecen ventajas sobre los que se<br />
realizan en el papel o el pizarrón, en primer lugar, porque son expresión de una absoluta<br />
espontaneidad. Los niños dibujan por el gusto de dibujar y con el único propósito<br />
inmediato de la actividad y la producción, excepto en algunos casos, como en el de la<br />
rayuela, en que el dibujo constituye el escenario del juego.<br />
Los dibujos en las aceras proporcionan asimismo la oportunidad de estudiar su<br />
producción en diferentes condiciones motoras. Los niños dibujan generalmente sentados<br />
12<br />
“Gestalt Principles in the Sidewalk Drawings and Games of Children”, Pedagogical Seminary and<br />
Journal of Genetic Psychology, 1832, 41, 192-210.