ierno Corporativo no es una panacea, no soluciona todo. Si una empresa quiere ir por el mal camino, puede instrumentar un montón de cuestiones de Gobierno Corporativo, pero hacerlas “de papel”, sin implementarlas de verdad. Aún así, la existencia de prácticas de Gobierno Corporativo es importante. Por ejemplo, a veces el directorio debe asegurar la existencia y cumplimiento de un Código de Ética, que los hace (a los directores) más responsables legalmente. Si un director firmó un código de que debía asegurar ciertos controles, cumplimientos que no se verificaron, entonces empiezan a cargársele responsabilidades legales y el tema gana fuerza. Los incentivos no son solo de tenor negativo, yo destaco por ejemplo un estudio del “Círculo de Empresas”, (grupo de empresas latinoamericanas que colaboran en el desarrollo de mejores prácticas de gobierno corporativo) muestra que ante el anuncio de “buenas prácticas” corporativas, el mercado reaccionó inmediatamente subiendo en promedio el 8 % el precio de sus acciones. - Ese estudio identifica las “mejores prácticas” de Gobierno Corporativo en 6 secciones: 1) Desempeño del directorio y relación con la gerencia ejecutiva, 2) Derechos más sólidos para los accionistas y mantenimiento del alineamiento; 3) Mejoramiento del entorno de control, 4) Transparencia y divulgación de la información; 5) Sostenibilidad del negocio; y 6) Mejores resultados operativos. ¿En cuáles estamos mejor o peor en la Argentina? - En ninguna de esas áreas se pueden lograr resultados sostenibles si no hay un buen Directorio y una Gerencia que tenga en mente cuestiones como estrategia, sostenibilidad, control, cumplimiento. Es función del directorio asegurar que haya asambleas, control, divulgación de información transparente y que el accionar de la empresa sea sustentable. No solo en la Argentina, sino en toda América Latina hay todavía una falta de comprensión de la importancia de buen directorio como herramienta del buen Gobierno Corporativo. Falta deshacerse de los directores de papel e integrar directorios que junten distintas capacidades y conocimientos, buscar directores independientes y objetivos, sin relación con los accionistas, ni con la gerencia, que no sea un ex accionista o un proveedor. A veces también pasa que “Cuando un inversor institucional se interesa en una empresa, en su due diligence exige la adecuación a prácticas de gobierno corporativo, porque es su manera de asegurar que sus derechos como accionista minoritario serán respetados”. alguien cumple todos esos puntos, pero es el mejor amigo del presidente. En la composición del directorio hay que pensar en lo que más beneficiará a la empresa. - ¿Qué métrica existe en la Argentina o en la región para evaluar los resultados de Gobierno Corporativo? - Todavía no existe una única métrica que permita hacerlo, pero dependiendo del tipo de empresa hay situaciones que pueden demostrar cierto éxito. En las empresas familiares el resultado exitoso es que la empresa siga existiendo. Que no se peleen, que no entren inversores indeseables, etcétera. En las listadas en Bolsa el valor de la acción es una métrica a considerar, pero hay que entender también que este es un ámbito donde varias prácticas se llevan a cabo sólo por la existencia de regulaciones exigentes en la materia. Si tenés buenas prácticas es un hecho que los inversores te ven con buenos ojos. El costo del capital se hace más barato (no solo para invertir en una empresa, sino también para salir), el mercado reconoce tu reputación. El caso más difícil de medir son las empresas cerradas. Si la Junta Directiva por primera vez establece una estrategia y a la empresa le va bien es difícil saber si es porque anduvo bien la economía, el sector, el negocio, o porque la estrategia sirvió. Lo importante es que hay un ejercicio de reconocimiento de riesgos, formas de mitigarlos, de estrategia, de control. Puede que todavía el mercado no sepa como valorarlo, pero sé de dueños que duermen más tranquilos porque tienen una Junta Directiva que piensa en estos temas. Lo importante es encontrar el incentivo justo, interno o externo, para cada empresa. Sergio Serrichio 96 • mayo-junio de 2015
mayo-junio de 2015 • 97