Brasil Final Report - Department of Physics - The Ohio State University

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Entre bloque y bloque el docente ha de promover:
a) diálogos entre él mismo y sus alumnos, y entre los alumnos;
b) la presentación de preguntas por parte de los alumnos, o por el docente mismo, y la discusión o
análisis de las respuestas;
c) que los alumnos tomen notas sobre la información del bloque observado, o dibujos de los
experimentos;
d) comentarios críticos de los alumnos, etc. ...
En otras palabras: el docente tratará de que cada alumno sea un espectador activo.
4. El docente encontrará bloques que justifiquen (por su interés didáctico) repetirlo, total o
parcialmente, aprovechando la tecnología de la videocasetera (funciones "slow" –“still"):
a) comparando tomas del video con ejemplos de la vida diaria, o promoviendo entre los alumnos la
búsqueda de esos ejemplos;
b) relacionando imágenes del video con temas afines de otras ciencias;
c) imaginando otros experimentos, y excitando la imaginación de sus alumnos;
d) proponiendo problemas (numéricos y no numéricos) y resolviéndolos con sus alumnos. Todo
esto forma parte de la concepción de espectador activo.
5. Creemos deseable una culminación del uso del video en clase con su proyección ininterrumpida
concebida como “función integradora" del trabajo realizado previamente
6. Un aspecto interesante pero difícil de llevar a la práctica es ofrecer al alumno la accesibilidad para
ver el video:
a) individualmente (así como se lee un libro en una biblioteca);
b) en grupo, en horario extra-escolar convenido con las autoridades;
c) en su casa. El video es un producto tecnológico que complementa didácticamente la tarea del aula,
que posee un atractivo cautivante largamente comprobado, y que por ello merece atención como
herramienta educativa.