16.01.2015 Views

Algunos otros Alias de la Militancia Roja - Museo SEAT

Algunos otros Alias de la Militancia Roja - Museo SEAT

Algunos otros Alias de la Militancia Roja - Museo SEAT

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

No obstante en aquel<strong>la</strong> conferencia <strong>la</strong> novedad fue <strong>la</strong> asistencia <strong>de</strong><br />

<strong>de</strong>legaciones <strong>de</strong>l Partido en Andalucía, Madrid y Vascongadas. Aquello<br />

supuso una motivación positiva para todos, porque pudimos escuchar <strong>de</strong><br />

boca <strong>de</strong> los camaradas <strong>de</strong> <strong>otros</strong> lugares cómo se organizaba allí el partido.<br />

Aquel<strong>la</strong> conferencia pasó a ser una <strong>de</strong> <strong>la</strong>s reuniones más importantes <strong>de</strong> <strong>la</strong><br />

época, porque <strong>de</strong> los tres camaradas que constituían <strong>la</strong> <strong>de</strong>legación andaluza,<br />

uno <strong>de</strong> ellos era <strong>Alias</strong> Lobato, que años más tar<strong>de</strong> sería Secretario General <strong>de</strong>l<br />

Partido <strong>de</strong>l Trabajo <strong>de</strong> España (PTE) y que no era otro que E<strong>la</strong>dio García<br />

Castro.<br />

Des<strong>de</strong> el primer momento, Lobato y yo pudimos comprobar que teníamos<br />

muchos puntos <strong>de</strong> vista coinci<strong>de</strong>ntes respecto a <strong>la</strong> política; por eso urdimos<br />

una coartada para que si un día se veía obligado a venir a Catalunya, pasara<br />

por mi casa. Así fue como, con consentimiento <strong>de</strong>l Partido, pasé a ser el<br />

contacto <strong>de</strong> emergencia en Catalunya <strong>de</strong>l responsable <strong>de</strong>l Partido en<br />

Andalucía. Aparte <strong>de</strong> los buzones c<strong>la</strong>n<strong>de</strong>stinos existentes en <strong>otros</strong> lugares y<br />

que ya no eran <strong>de</strong> mi incumbencia.<br />

Cuando se daba <strong>la</strong> circunstancia que uno <strong>de</strong> los camaradas tenía <strong>la</strong><br />

dirección <strong>de</strong> otro, como en el caso <strong>de</strong> Lobato y yo, se exigía que cada uno<br />

tuviera sus c<strong>la</strong>ves, so<strong>la</strong>mente <strong>de</strong>scifrables por él mismo, para que en caso <strong>de</strong><br />

<strong>de</strong>tención <strong>la</strong> policía no pudiera conocer más que <strong>la</strong> coartada que ofreciera el<br />

<strong>de</strong>tenido. Por eso, Lobato anotó mi dirección en su c<strong>la</strong>ve particu<strong>la</strong>r y no<br />

pasarían muchos meses para que tuviera que hacer uso <strong>de</strong> el<strong>la</strong>.<br />

Lobato era un estudiante <strong>de</strong> ingeniería y tenía muchas inquietu<strong>de</strong>s<br />

revolucionarias, que se correspondían con el dolor que sentía por ser hijo <strong>de</strong><br />

represaliados por el franquismo; por ello, a<strong>de</strong>más <strong>de</strong> aten<strong>de</strong>r a sus estudios y<br />

tras tomar contacto con el Partido, sitió el <strong>de</strong>ber <strong>de</strong> organizarlo en Andalucía,<br />

empezando por el entorno que él dominaba en su localidad. No obstante<br />

pronto le localizó <strong>la</strong> policía y le metieron un tiempo en <strong>la</strong> cárcel, esperando<br />

que el “revoltoso estudiante” se <strong>de</strong>shiciera <strong>de</strong> sus pensamientos<br />

revolucionarios. Pero Lobato, nada más salir, creo recordar que en libertad<br />

provisional, tomó un <strong>SEAT</strong> 600, y con dos camaradas más también muy<br />

vigi<strong>la</strong>dos por <strong>la</strong> policía, vinieron a Barcelona. Como sólo tenían mi dirección,<br />

allí se dirigieron para que les pusiera en contacto con el Partido y les<br />

proporcionara algún lugar para dormir. De manera que, tras el susto que me<br />

dieron cuando l<strong>la</strong>maron a mi puerta a <strong>la</strong>s once <strong>de</strong> <strong>la</strong> noche, una vez que les<br />

reconocí, tomé mi moto y les pedí que me siguieran con el 600. Quince<br />

minutos más tar<strong>de</strong> ya estábamos en casa <strong>de</strong> <strong>Alias</strong> Mao, un camarada<br />

trabajador <strong>de</strong> <strong>SEAT</strong> que por ser soltero y tener piso con tres habitaciones,<br />

consi<strong>de</strong>ré i<strong>de</strong>al para hospedarles unas cuantas noches, hasta encontrar un<br />

- 249 -

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!