17.05.2013 Views

El arte de no amargarse la vida - El mundo del "manitas "

El arte de no amargarse la vida - El mundo del "manitas "

El arte de no amargarse la vida - El mundo del "manitas "

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

quejas, pero intentaron conciliar el sueño.<br />

Transcurrió una hora y <strong>la</strong> voz <strong>no</strong> cal<strong>la</strong>ba. Cada<br />

pocos minutos, arreciaba:<br />

—¡Pero qué sed que tengo! ¡Qué sed que<br />

tengo!<br />

U<strong>no</strong> <strong>de</strong> los viajeros, cansado <strong>de</strong>l quejica, se<br />

levantó, caminó hasta el <strong>la</strong>vabo <strong>de</strong>l tren y llenó<br />

un vaso <strong>de</strong> agua. Sin <strong>de</strong>cir pa<strong>la</strong>bra, se lo entregó<br />

al viajero sediento, que se lo bebió <strong>de</strong> golpe. Al<br />

cabo <strong>de</strong> media hora, cuando todos ya habían<br />

conciliado, esta vez, un buen sueño, una voz los<br />

<strong>de</strong>spertó <strong>de</strong> nuevo:<br />

—¡Pero qué sed tenía! ¡Qué sed tenía!<br />

Como ilustra el cuento que acabamos <strong>de</strong> re<strong>la</strong>tar,<br />

a veces los seres huma<strong>no</strong>s po<strong>de</strong>mos convertir<strong>no</strong>s<br />

en campeones <strong>de</strong> <strong>la</strong> queja. De hecho, todo el<br />

tema <strong>de</strong> <strong>la</strong> salud mental trata <strong>de</strong> un solo<br />

asunto: apren<strong>de</strong>r a combatir <strong>la</strong>s ¡quejas, quejas,<br />

quejas! Vamos ver, a continuación, cómo<br />

po<strong>de</strong>mos hacerlo para ser un poco me<strong>no</strong>s<br />

quejicas y un poco más felices.<br />

Hace bastantes años, u<strong>no</strong>s investigadores<br />

llevaron a cabo un curioso estudio para evaluar<br />

<strong>la</strong> capacidad <strong>de</strong> los niños para soportar <strong>la</strong>s<br />

frustraciones. Su hipótesis era que los niños que<br />

aguantaban mejor <strong>la</strong>s situaciones <strong>de</strong> malestar<br />

tenían una psicología diferente: eran más

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!